La transición democrática de nuestros días brinda una gran oportunidad para pensar y repensar el futuro; para tomar las decisiones sobre lo qué queremos lograr, a dónde queremos ir, qué queremos combatir para saber qué debemos evitar, manifestó el presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, el priísta Jesús Murillo Karam.
Asumió que no sea la circunstancia la que configure las decisiones de nuestro futuro. "No debemos mirar al destino como algo predeterminado o inmutable. Necesitamos ser capaces de construirlo a partir de nuestras esperanzas y de nuestros anhelos".
Consideró que hoy, en el Poder Legislativo se enfrentan a decisiones de la mayor importancia para el país y advirtió: "No puede haber tiempos perdidos, tampoco prisas febriles. No puede haber salidas circunstanciales ni obstáculos estructurales".
Puntualizó que esta tarea requiere fundamentalmente de escuchar todas las voces, de estar dispuestos a escuchar con la mente abierta; buscar en la razón de todos, las relaciones comunes para lograr la razón de la mayoría crucial para que las instituciones del Estado no solo tengan la legalidad que otorga el voto sino la legitimidad que otorga la credibilidad ganada en el ejercicio del gobierno.
Recalcó que gobernar es asumir responsabilidades; pero que la categoría de ciudadano también obliga, obliga a asumirse como tal. "Si bien es cierto que el combate a los principales problemas que padecemos requieren de un gobierno eficaz, la responsabilidad del cambio más profundo y necesario en nuestro país, es de todos.
Requerimos con urgencia un cambio social que genere valores y prácticas distintos a los de hoy o a los que hoy prevalecen y que nos lleven a sembrar el valor de la ley y la justicia, la libertad, la transparencia, la igualdad en la mente de cada uno de los mexicanos".
Durante su participación en la ceremonia del CCII Aniversario de la Gesta Heroica de la Independencia de México, el presidente de la Cámara Baja, dijo que se requiere un cambio en la más amplia expresión de la esencia significado del Estado de Derecho.
Asumió que no sea la circunstancia la que configure las decisiones de nuestro futuro. "No debemos mirar al destino como algo predeterminado o inmutable. Necesitamos ser capaces de construirlo a partir de nuestras esperanzas y de nuestros anhelos".
Consideró que hoy, en el Poder Legislativo se enfrentan a decisiones de la mayor importancia para el país y advirtió: "No puede haber tiempos perdidos, tampoco prisas febriles. No puede haber salidas circunstanciales ni obstáculos estructurales".
Puntualizó que esta tarea requiere fundamentalmente de escuchar todas las voces, de estar dispuestos a escuchar con la mente abierta; buscar en la razón de todos, las relaciones comunes para lograr la razón de la mayoría crucial para que las instituciones del Estado no solo tengan la legalidad que otorga el voto sino la legitimidad que otorga la credibilidad ganada en el ejercicio del gobierno.
Recalcó que gobernar es asumir responsabilidades; pero que la categoría de ciudadano también obliga, obliga a asumirse como tal. "Si bien es cierto que el combate a los principales problemas que padecemos requieren de un gobierno eficaz, la responsabilidad del cambio más profundo y necesario en nuestro país, es de todos.
Requerimos con urgencia un cambio social que genere valores y prácticas distintos a los de hoy o a los que hoy prevalecen y que nos lleven a sembrar el valor de la ley y la justicia, la libertad, la transparencia, la igualdad en la mente de cada uno de los mexicanos".
Durante su participación en la ceremonia del CCII Aniversario de la Gesta Heroica de la Independencia de México, el presidente de la Cámara Baja, dijo que se requiere un cambio en la más amplia expresión de la esencia significado del Estado de Derecho.
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