Alejandro Colón
El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, subrayó la necesidad de que las autoridades financieras generen las condiciones para ofrecer mecanismos de ahorro y crédito a costos accesibles a la población menos favorecida, al reconocer que "no hay condición más cara y costosa que la de ser pobre".
En la inauguración del Foro Internacional de Inclusión Financiera México 2014, Carstens destacó que la diferencia entre pobres y ricos no radica en tener conocimientos básicos o interés en temas financieros, sino "en los elevadísimos costos de transacción que enfrentan los que menos tienen".
Por ello, ante el Presidente Enrique Peña Nieto y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, reconoció que las "tandas" organizadas en los trabajos o con los vecinos son una respuesta a la necesidad de ahorro y financiamiento de ese sector de la población.
"El gran reto que tenemos las autoridades financieras es generar las condiciones para que estas necesidades de ahorro y financiamiento encuentren cauces modernos confiables y eficientes que permitan evolucionar los modelos populares de ahorro y crédito hacia canales formales. Esto debe abatir para el usuario los costos de transacción", pidió.
Reconoció que la Reforma Financiera abona de manera significativa en este sentido, y en manera conjunta la Reforma Telecom permitirá explotar a plenitud el potencial tecnológico en beneficio de una mayor inclusión financiera.
Consideró que contar con servicios de telecomunicaciones más accesibles en costo, eficientes y de mayor calidad y cobertura significarán acceso más franco de intermediación financiera para la población de menores recursos y en consecuencia elevará las posibilidades de bancarizar a un elevado porcentaje de la población.
A ello, indicó, se deben sumar las condiciones de confianza derivadas de la estabilidad económica.
El gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, subrayó la necesidad de que las autoridades financieras generen las condiciones para ofrecer mecanismos de ahorro y crédito a costos accesibles a la población menos favorecida, al reconocer que "no hay condición más cara y costosa que la de ser pobre".
Por ello, ante el Presidente Enrique Peña Nieto y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, reconoció que las "tandas" organizadas en los trabajos o con los vecinos son una respuesta a la necesidad de ahorro y financiamiento de ese sector de la población.
"El gran reto que tenemos las autoridades financieras es generar las condiciones para que estas necesidades de ahorro y financiamiento encuentren cauces modernos confiables y eficientes que permitan evolucionar los modelos populares de ahorro y crédito hacia canales formales. Esto debe abatir para el usuario los costos de transacción", pidió.
Reconoció que la Reforma Financiera abona de manera significativa en este sentido, y en manera conjunta la Reforma Telecom permitirá explotar a plenitud el potencial tecnológico en beneficio de una mayor inclusión financiera.
Consideró que contar con servicios de telecomunicaciones más accesibles en costo, eficientes y de mayor calidad y cobertura significarán acceso más franco de intermediación financiera para la población de menores recursos y en consecuencia elevará las posibilidades de bancarizar a un elevado porcentaje de la población.
A ello, indicó, se deben sumar las condiciones de confianza derivadas de la estabilidad económica.
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