Armando Maceda
Entre trifulcas afuera del Palacio Legislativo de San Lázaro y manifestaciones de diputados de la izquierda en el recinto en sesión de Congreso General, tomó de protesta Enrique Peña Nieto como Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos.
Previamente legisladores de los siete grupos parlamentarios externaron sus posicionamientos con motivo de la transmisión del Poder Ejecutivo Federal, a partir de las 9: 30 horas.
En las curules donde se sientan los diputados del PRD, MC y PT, éstos colocaron cruces en señal de luto nacional por los que murieron por la violencia en la guerra de Felipe Calderón contra el crimen organizado.
También pusieron atrás de la tribuna con la leyenda: "Imposición Consumada, México de luto".
Peña Nieto rindió protesta en medio de gritos de rechazo y apoyo y en punto de las 11:15 levantó la mano en sesión solemne ante Congreso General, en San Lázaro.
Inmediatamente sus palabras fueron: "Protesto guardar y hacer guardar la Constitución y las leyes que de ella emanen, y desempeñar leal y patrióticamente el cargo de Presidente de la República que el pueblo me ha conferido, mirando en todo por el bien y la prosperidad de la Unión; y si así no lo hiciere que la Nación me lo demande".
En ese momento los legisladores inconformes le lanzaron billetes de imitación de diversa denominaciones, en alusión, porque según ellos, fue una presidencia comprada. Los priistas con aplausos y gritos de "Peña Presidente"," Peña Presidente"…trataron que distraer y minimizar las protestas.
Una vez que Enrique Peña Nieto tomó la protesta, el ciudadano Felipe Calderón Hinojosa se quitó la banda presidencial misma que le entregó al presidente de la Mesa Directiva, Jesús Murillo, y de inmediato se la pasó a al nuevo mandatario de México para que éste se la colocara.
Volvieron a mostrase pancartas entre los de la izquierda: "Entrega silla bañadas en sangre" de estado fallido con Calderón a estado vendido con su sucesor".
Acto seguido, Jesús Murillo Karam, pidió a las comitivas protocolarias para acompañaran al presidente Enrique Peña Nieto y al ciudadano Felipe Calderón, para que abandonaran el salón de sesiones.
Así, la toma de protesta del Presidente Enrique Peña Nieto se vio empañada, pero más por los enfrentamientos entre grupos de manifestantes y la Policía Federal sobre avenida Eduardo Molina, y cuyo saldo fue de dos detenidos y varios lesionados por los proyectiles, uno de fue llevado grave al hospital.
Fueron seis horas de actos de violencia y de "bombardeos" de bombas molotov, petardos y piedras, cuya respuesta fueron gases lacrimógenos de parte de los granaderos federales, quienes reguardaba todo el frente, por el lado de la terminal de San Lázaro.
Prácticamente desde las 07: 00 horas de la mañana empezó la tensión con el arribo de grupos de manifestantes de diversas organizaciones para inconformidades contra la toma de posesión de Peña Nieto.
Entre los inconformes, sobresalieron pequeños grupos de jóvenes, cubiertos con bufandas, pasamontañas y mochilas, como si fueran cargados de proyectiles.
En medio de las consignas empezaron empujar las vallas metálicas con intentos de derribar, lanzaron gritos y luego vino el arrojo de proyectiles contra los antimotines, que a su vez respondieron con el disparo de sus armas, lanzado bombas de bombas de humo y gas lacrimógeno.
Así se dispersó por momentos a los rijosos y el ambiente inundó de ese gas de olor mostaza que irritaba los ojos y picaba la nariz.
Publicar un comentario