Por: Noel F. Alvarado.
Visiblemente molestos, familiares de los jóvenes desparecidos del bar Heaven , rompieron pláticas con el procurador capitalino, Rodolfo Ríos Garza al considerar que no hay avances en la investigación para localizar a sus hijos. Debido a ello, pidieron la intervención del Procurador General de la República, Jesús Murillo Karan y anunciaron una serie de movilizaciones, principalmente marchas y manifestaciones en demanda de justicia.
A 23 días de la desaparición de doce jóvenes del bar de la zona rosa, localizado en la Colonia Juárez y en lo que fue la quinta reunión a puerta cerrada, con el procurador de justícia del Distrito Federal, Rodolfo Ríos, familiares de las víctimas, molestas y agritos rompieron el diálogo con el abogado de la ciudad, al considerar que no hay avances en la investigación y solo hay promesas incumplidas.
Entrevistados a su salida del encuentro, que duro casi dos horas, los familiares de los desaparecidos, sumaron sus voces con sus compañeros que los esperaban a las afueras de la procuraduría capitalina para exigir justicia y que no se les siga dando lo que llamaron "atole con el dedo".
Ahí, con tono enérgico y molestos, los familiares de los desaparecidos, gritaron "no nos dicen nada. Ya estamos hartos. No hay justicia. Queremos a nuestros hijos… Queremos a nuestros hijos", exclamaron a las afueras de la entrada principal de la Procuraduría General de justicia del Distrito Federal.
El grupo de familiares y amigos de los jóvenes desaparecidos de Tepito, informaron que ya entablaron comunicación con autoridades de la Procuraduría General de la República, para que dicha institución, atraiga la investigación del caso, debido a que la procuraduría capitalina no da resultados y solo su titular se concretó a informales que el próximo viernes les dará los avances que se tienen.
Consideraron que el cese del titular de Centro de Atención para Personas Extraviadas o Ausentes, Francisco Trujillo Fuentes, demuestra la incapacidad de la procuraduría para investigar los casos de desaparecidos en la Ciudad de México, pues argumentaron que ellos son los que les han facilitado pruebas y evidencias de la desaparición de sus hijos y aún con ello -dijeron- no pueden con el caso.
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