Cruel y despiadado asesinato fue cometido en contra de una ama de casa, la cual fue ultimada a martillazos por su propio hijo menor de edad porque su progenitora le dijo que lo iba a correr de su casa por haberle robado 200 pesos a su hermanita de su alcancía. Pese a que el presunto parricida, fraguó una coartada, esta se vino abajo, al ser interrogado por agentes investigadores de la PGJDF al caer en contradicciones y terminar por confesar su crimen.
De acuerdo a las investigaciones de la Policía Investigadora en Coyoacán 5, Andrés Avelino Granados de 16 años de edad se encontraba en su domicilio, localizado en la calle de Chontales, en el pueblo de Santa Cruz Alcapixca en la delegación Xochimilco.
Debido a que el menor, necesitaba dinero para comprarse dosis de droga y no tenía, buscó entre las pertenencias de su domicilio y, ahí, encontró la alcancía de su hermanita, por lo que le sustrajo 200 pesos con los que adquirió su droga.
Cuando Reyna Granados Galicia, llegó a su domicilio, encontró la alcancía sin el dinero, por lo que al regresar su hijo Andrés, le reclamó el porqué se había robado el dinero de su hermanita que tenía en la alcancía y le advirtió que lo iba a correr de su casa.
Ello, trajo como consecuencia que que el menor Andrés, esperara a que madre se fuera a dormir. Ya en la madrugada, tomó un martillo para luego golpearla en la cabeza hasta provocarle traumatismo creaneoencefálico. Para tratar de evadir su crimen, cargó el cuerpo de su madre y lo arrojó a la entrada de su casa.
Luego, llamó a los cuerpos de emergencia para que auxiliarán a su madre al decirles que había salido y que cuando salió a buscarla porque ya se había tardado, la encontró tirada y sangrando de la cabeza a la entrada de su domicilio.
En cuestión de minutos, arribaron socorristeis de la Cruz Roja, mismos que cuando revisaron el cuerpo de Reyna Granados Galicia, ésta aún tenía signos de vida por lo que le brindaron los primeros auxilios, par a luego, trasladarla al hospital de zona 2 del IMSS, donde en los momentos en que recibía atención médica, dejó de existir.
Debido a ello, agentes de la Policía investigadora adscrita en Coyoacán 5, procedieron a interrogar al hijo de la occisa, quien cayó en contradicciones sobre su coartada y terminó por confesar que él había asesinado a su propia madre a quien golpeó con un martillo, el cual fue localizado y presentado ante el Ministerio Público de la Fiscalía en Coyoacán.
El menos señalado como presunto asesino, fue puesto a disposición de las autoridades ministeriales y en las próximas horas se determinará su situación jurídica.
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