Destaca el coordinador nacional que sólo en Chihuahua, León y Puebla las unidades de combate a plagiarios tienen estructura operativa eficiente, mientras que en el resto del país, las mismas no corresponden con la intensidad del delito, que sigue a la alza
Arturo R. Pansza
En Chihuahua, León y Puebla, hay unidades antisecuestro con una estructura operativa eficiente, mientras que en el resto del territorio mexicano, las mismas no corresponden con la intensidad del delito.
Una vez que informara que el secuestro se mantiene al alza, ante el hecho de que en enero se reportaron 133 casos y en febrero 145, el coordinador nacional antisecuestro, Renato Sales Heredia, informó además que diez entidades concentran el 74 por ciento de los casos y son: Morelos, Guerrero, Tamaulipas, Michoacán, Durango, Veracruz, Oaxaca, Zacatecas, Tabasco y el Estado de México.
Comunicó que Chihuahua ha demostrado tener el modelo más adecuado para la reclusión de secuestradores, porque su Penal Número Uno concentra a 572 sentenciados, con un modelo ideal en el que los plagiarios no tienen contacto con otros reos; en condiciones similares operan los penales de Nuevo León y Puebla.
Durante una conferencia de prensa notificó que en lo que va del presente año, se detuvieron 147 presuntos secuestradores y se desarticularon a 21 organizaciones criminales dedicadas a ese ilícito.
En enero se detuvieron a 17 presuntos delincuentes, en febrero a 80 y en lo que va de marzo a 50, además de que en la totalidad de los días que van de 2014, fueron liberadas, por parte de las fuerzas federales, 15 personas.
Acompañado de funcionarios del gabinete de seguridad, Sales refrendó que en los últimos meses aumentaron las denuncias por este ilícito, debido a la confianza de la ciudadanía en las autoridades.
Hizo alusión que con base a los seguimientos que se llevan a cabo, los delincuentes han mutado en sus actividades criminales, ante el desmembramiento de organizaciones dedicadas al narcotráfico.
Los que antes se dedicaban al narcomenudeo ahora se ocupan de privar de la libertad a personas a cambio de cantidades bajas de dinero, abundó y mencionó que se trabaja en el desmantelamiento de grupos delictivos para que disminuyan los secuestros de manera eficiente y, en ese sentido se tienen resultados.
Dio cuenta que el aumento del número de secuestros en los dos primeros meses del año es por el nivel de confianza para denunciar el delito ante el ministerio público.
Aceptó que la cifra de los casos no denunciados es enorme, al tiempo que refrendó que un distintivo de los grupos de secuestradores es que proceden de otras bandas que se han dispersado; si antes se dedicaban al trasiego de drogas, ahora secuestran por bajas cantidades de dinero.
Refirió que en la mayoría de los penales del país continúa el uso de celulares, vía de comunicación para extorsionar y organizar los plagios, de ahí que dijera se requiere de una mayor participación de los gobiernos estatales y reforzar la coordinación con la Federación, como ya ocurre en Tabasco y en el resto de las entidades con mayor incidencia de plagios.
Arturo R. Pansza
En Chihuahua, León y Puebla, hay unidades antisecuestro con una estructura operativa eficiente, mientras que en el resto del territorio mexicano, las mismas no corresponden con la intensidad del delito.
Una vez que informara que el secuestro se mantiene al alza, ante el hecho de que en enero se reportaron 133 casos y en febrero 145, el coordinador nacional antisecuestro, Renato Sales Heredia, informó además que diez entidades concentran el 74 por ciento de los casos y son: Morelos, Guerrero, Tamaulipas, Michoacán, Durango, Veracruz, Oaxaca, Zacatecas, Tabasco y el Estado de México.
Comunicó que Chihuahua ha demostrado tener el modelo más adecuado para la reclusión de secuestradores, porque su Penal Número Uno concentra a 572 sentenciados, con un modelo ideal en el que los plagiarios no tienen contacto con otros reos; en condiciones similares operan los penales de Nuevo León y Puebla.
Durante una conferencia de prensa notificó que en lo que va del presente año, se detuvieron 147 presuntos secuestradores y se desarticularon a 21 organizaciones criminales dedicadas a ese ilícito.
En enero se detuvieron a 17 presuntos delincuentes, en febrero a 80 y en lo que va de marzo a 50, además de que en la totalidad de los días que van de 2014, fueron liberadas, por parte de las fuerzas federales, 15 personas.
Acompañado de funcionarios del gabinete de seguridad, Sales refrendó que en los últimos meses aumentaron las denuncias por este ilícito, debido a la confianza de la ciudadanía en las autoridades.
Hizo alusión que con base a los seguimientos que se llevan a cabo, los delincuentes han mutado en sus actividades criminales, ante el desmembramiento de organizaciones dedicadas al narcotráfico.
Los que antes se dedicaban al narcomenudeo ahora se ocupan de privar de la libertad a personas a cambio de cantidades bajas de dinero, abundó y mencionó que se trabaja en el desmantelamiento de grupos delictivos para que disminuyan los secuestros de manera eficiente y, en ese sentido se tienen resultados.
Dio cuenta que el aumento del número de secuestros en los dos primeros meses del año es por el nivel de confianza para denunciar el delito ante el ministerio público.
Aceptó que la cifra de los casos no denunciados es enorme, al tiempo que refrendó que un distintivo de los grupos de secuestradores es que proceden de otras bandas que se han dispersado; si antes se dedicaban al trasiego de drogas, ahora secuestran por bajas cantidades de dinero.
Refirió que en la mayoría de los penales del país continúa el uso de celulares, vía de comunicación para extorsionar y organizar los plagios, de ahí que dijera se requiere de una mayor participación de los gobiernos estatales y reforzar la coordinación con la Federación, como ya ocurre en Tabasco y en el resto de las entidades con mayor incidencia de plagios.
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