Patricia Carrasco
Los más de ciento veinte obispos del país, deben trabajar en la construcción de un país diferente, por un México, una Iglesia y una comunidad más limpios, evitar el error, la corrupción, la mentira, la violencia e ir al encuentro de los creyentes, sostuvo el obispo de la cuarta zona pastoral de la Arquidiócesis Primada de México, Antonio Ortega Franco.
En la Catedral Metropolitana, al oficiar la misa dominical, manifestó que los obispos de México se comprometieron ante el presidente Enrique Peña Nieto a ser actores clave para erradicar la corrupción y la violencia del país.
En la última reunión del pasado viernes, de la CEM, donde estuvo presente el Presidente de la República, y otros funcionarios federales, los obispos agregó el prelado, "el compromiso de los obispos es precisamente de ir creando una Iglesia, una comunidad y un país más limpio, donde evitemos el error, la mentira, la corrupción y la violencia. Es el compromiso de los obispos".
Ortega Franco, en su homilía sostuvo que el compromiso de los obispos es construir una "Iglesia nueva; quitar todo lo que estorba y ayudar a las personas, no sólo con las palabras. Hay que dar un abrazo de alegría y paz".
En la citada reunión, dijo que allí se habló del compromiso de los obispos de crear una Iglesia y una sociedad diferente, un mejor país.
Ejemplificó que las monjas de la cuarta zona pastoral, de la orden María Antonia, se dedican a asistir y ayudar a las mujeres en situación de prostitución y semanalmente realizan 200 entrevistas en la calle.
Por lo que adelantó el próximo 10 de mayo, Día de las Madres celebrará una misa para ellas. Y recordó que en su juventud, en una celebración religiosa un hombre se le acercó y pidió que la "celebrara de la mejor manera posible, pues era el cumpleaños de su madre que había sido prostituta y él era médico".
El obispo Ortega Franco remarcó que la Iglesia Católica refrendó ante el gobierno de la República su compromiso social, de buscar un México mejor, con más justicia social.
Al finalizar la ceremonia religiosa, recordó que el pasado 30 de abril se festejó el Día del Niño, por lo que la Iglesia Católica también los quiere festejar, por lo que les pidió realizar una fila para que los niños presentes recibieran dulces y juguetes a los menores de edad, con ese motivo.
En la última reunión del pasado viernes, de la CEM, donde estuvo presente el Presidente de la República, y otros funcionarios federales, los obispos agregó el prelado, "el compromiso de los obispos es precisamente de ir creando una Iglesia, una comunidad y un país más limpio, donde evitemos el error, la mentira, la corrupción y la violencia. Es el compromiso de los obispos".
En la citada reunión, dijo que allí se habló del compromiso de los obispos de crear una Iglesia y una sociedad diferente, un mejor país.
Ejemplificó que las monjas de la cuarta zona pastoral, de la orden María Antonia, se dedican a asistir y ayudar a las mujeres en situación de prostitución y semanalmente realizan 200 entrevistas en la calle.
Por lo que adelantó el próximo 10 de mayo, Día de las Madres celebrará una misa para ellas. Y recordó que en su juventud, en una celebración religiosa un hombre se le acercó y pidió que la "celebrara de la mejor manera posible, pues era el cumpleaños de su madre que había sido prostituta y él era médico".
El obispo Ortega Franco remarcó que la Iglesia Católica refrendó ante el gobierno de la República su compromiso social, de buscar un México mejor, con más justicia social.
Al finalizar la ceremonia religiosa, recordó que el pasado 30 de abril se festejó el Día del Niño, por lo que la Iglesia Católica también los quiere festejar, por lo que les pidió realizar una fila para que los niños presentes recibieran dulces y juguetes a los menores de edad, con ese motivo.
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