Noel F. Alvarado
CIUDAD NEZAHUALCOYOTL, Méx.- Por mutilar y sacar los ojos a su hijo Fernando durante un ritual religioso, un juez sentenció a 30 años de prisión a la madre de éste, a sus abuelos maternos, dos tíos y una mujer por el delito de tentativa de homicidio.
De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), los hechos ocurrieron el 24 de mayo de 2012, en un domicilio de la Colonia Ejidos de San Agustín Atlapulco.
Para la madre del niño, María del Carmen Ríos García, así como sus abuelos, Martha García Vargas y Ciro Ríos Benítez, el juez fijó la pena privativa de la libertad, una multa de 105,280 pesos y una reparación del daño que asciende a 129,385 pesos. Lo anterior debido a que el ilícito tuvo la agravante de haber sido cometido contra un descendiente consanguíneo en línea recta.
En tanto, para sus tíos Jesús Ríos García y Ruth Lizbeth Ríos García, así como Yesenia Mayela Macías Charles, se decretó la pena de 30 años y una multa de 105,285 pesos y 59,008 pesos como reparación del daño, pues el delito contó con la agravante de haber sido cometido con ventaja. Las seis persona habían sido vinculadas a proceso desde el 1o. de junio de 2012.
Cabe recordar que la agresión contra Fernandito ocurrió el 24 de mayo de 2012, cuando su madre y tía le sacaron los ojos debido a que se negó a cerrarlos mientras ellos realizaban un ritual religioso.
Fernando, un niño que perdió la vista tras ser atacado por su mamá y su tía, se encuentra con su papá y su abuela paterna después que el Tribunal Oral del Distrito Judicial de Nezahualcóyotl, Estado de México, ordenó su reintegración a la familia.
Durante más de un año, el menor y su hermano Kevin permanecieron en el albergue Villa Hogar del DIF del Estado de México (DIFEM) como medida de protección.
En mayo de 2012, la madre y tía de Fernando le sacaron los ojos en un ritual religioso. El menor estaba a punto de cumplir 6 años cuando perdió la vista definitivamente.
Al menor se le colocaron unas prótesis temporales, las cuales serán intercambiadas conforme vaya creciendo.
Actualmente el menor vive con su padre y abuela, después de haber vivido por más de un año en el DIF del Estado de México.
De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM), los hechos ocurrieron el 24 de mayo de 2012, en un domicilio de la Colonia Ejidos de San Agustín Atlapulco.
En tanto, para sus tíos Jesús Ríos García y Ruth Lizbeth Ríos García, así como Yesenia Mayela Macías Charles, se decretó la pena de 30 años y una multa de 105,285 pesos y 59,008 pesos como reparación del daño, pues el delito contó con la agravante de haber sido cometido con ventaja. Las seis persona habían sido vinculadas a proceso desde el 1o. de junio de 2012.
Cabe recordar que la agresión contra Fernandito ocurrió el 24 de mayo de 2012, cuando su madre y tía le sacaron los ojos debido a que se negó a cerrarlos mientras ellos realizaban un ritual religioso.
Fernando, un niño que perdió la vista tras ser atacado por su mamá y su tía, se encuentra con su papá y su abuela paterna después que el Tribunal Oral del Distrito Judicial de Nezahualcóyotl, Estado de México, ordenó su reintegración a la familia.
Durante más de un año, el menor y su hermano Kevin permanecieron en el albergue Villa Hogar del DIF del Estado de México (DIFEM) como medida de protección.
En mayo de 2012, la madre y tía de Fernando le sacaron los ojos en un ritual religioso. El menor estaba a punto de cumplir 6 años cuando perdió la vista definitivamente.
Al menor se le colocaron unas prótesis temporales, las cuales serán intercambiadas conforme vaya creciendo.
Actualmente el menor vive con su padre y abuela, después de haber vivido por más de un año en el DIF del Estado de México.
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