La megamarcha que se concentró en la Plaza de la Constitución, terminó en actos de vandalismo y enfrentamientos con policías federales y de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal en Palacio Nacional, cuando los presuntos anarquistas arrojaron petardos, bombas molotov, tubos, botellas y todo tipo de objetos contundentes al personal que resguardaba los alrededores de Palacio Nacional. En medio de gas lacrimógeno, con tolete y escudo en mano, los granaderos arremetieron contra los jóvenes que realizaban actos de vandalismo y que arrojaban prendas de vestir con fuego. Después de una hora de agresiones y enfrentamientos, los uniformados de la SSPDF, lograron retirar a los manifestantes encapuchados.
Los acontecimientos violentos originados por los presuntos anarquistas, dejó como resultado al menos cinco policías lesionados y 29 detenidos, entre ellos un menor de edad y una mujer, los cuales fueron remitidos ante las autoridades ministeriales de la procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, donde se les acusa de ataques a la paz pública, lesiones y lo que resulte.
Fue después de las 20:30 horas y cuando la mayoría de los manifestantes ya se había retirado, un numeroso grupo de jóvenes encapuchados, empezaron a agredir al personal de seguridad y policías federales que resguardaban las instalaciones de Palacio Nacional, para evitar que se repitieran los destrozos y quema de la puerta principal de ese recinto histórico nacional.
En esos momentos, uno de los encapuchados, logró brincar la barrera colocada y fue entonces cuando sus compañeros, empezaron a arrojar todo tipo de objetos hacia Palacio Nacional, lo que generó que los policías federales y uniformados de la Secretaría de Seguridad Pública, arrojaran gas lacrimógeno y el químico de los extinguidores, al tiempo que procedieron a tratar de replegarlos, lo que generó que desde ese momento se registraran enfrentamientos constantes con los policías del Agrupamiento de Granaderos.
Durante más de una hora, los presuntos anarquistas arrojaron bombas molotov, botellas, tubos, palos, pedazos de adoquín y otros objetos contundentes a los granaderos y policías federales, así como prendas de vestir con fuego. Cerca de las 21:30 horas, la tensión aumentó, cuando los encapuchados, se armaron de valor y agredieron a los policías. En respuesta, los granaderos con escudo y tolete en mano y tras arrojarles gas lacrimógeno y químico de extintores, arremetieron contra los anarquistas para poco a poco replegarlos y ya cerca de las 22:00 horas desalojar las inmediaciones de Palacio Nacional y el Zócalo del numeroso grupo de jóvenes que ocasionaron actos de vandalismo y que se enfrentaron a la policía.
Durante los acontecimientos violentos en las inmediaciones de Palacio Nacional, la policía logró la captura de al menos 13 presuntos responsables, los cuales fueron remitidos ante las autoridades ministeriales.
En tanto que otros 16 implicados en hechos violentos durante la marcha, fueron detenidos en enfrentamientos entre anarquistas en el Boulevard Puerto Aéreo y la calzada General Ignacio Zaragoza, en los momentos en que un grupo de encapuchados que se dirigían a la megamarcha, agredieron a la policía de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal.
Ahí, alrededor de las 13:30 horas los uniformados desplegaron un operativo que inicialmente fue contenido por los radicales quienes arrojaron explosivos con tubos tipo bazuca; petardos y bombas molotov. En el enfrentamiento provocaron severos daños a dos patrullas de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal a las que reventaron los cristales e intentaron incendiar.
En ese lugar, los rijosos poco a poco comenzaron a ser replegados con el avance de los agrupamientos especiales de la SSPDF, aunque en el camino formaron barricadas con fogatas, piedras y ramas. Los granaderos y el Grupo Especial Metropolitano sofocaron el fuego con extintores y frenaron el paso de cohetones con los escudos acrílicos. Los reportes preliminares señalan que al menos tres policías resultaron heridos.
Al notar que los policías no retrocedían, corrieron hacia la calle Aviación Militar, en la colonia Federal, donde finalmente fueron encapsulados por los dos extremos. Una vez inmovilizados, les aseguraron cadenas, tubos y bazucas lanzacohetes de pirotecnia, bóxers de hierro, petardos, bombas molotov y otros objetos que utilizaron para provocar los disturbios.
Los encapuchados fueron abordados en diferentes vehículos policiales y trasladados a diferentes instalaciones de la Procuraduría capitalina, para rendir su declaración en torno a los hechos de violencia.
Es importante destacar que las tres marchas que se concentraron en el Zócalo capitalino, también provocaron un severo congestionamiento vial y molestia entre los capitalinos, quienes tuvieron que buscar alternativas para llegar a sus domicilios y centros de trabajo, incluso en algunas zonas parte de los asistentes a esta marcha en apoyo a las 43 personas desaparecidas en Iguala, Guerrero, desde el pasado 26 de septiembre.
Durante su paso por la zona oriente de la Ciudad de México, los encapuchados hicieron pintas sobre el muro de contención del Circuito Interior y del Sistema de Transporte Colectivo Metro, en tanto, otros grupos bloquearon los carriles centrales del Circuito Interior con palos y algunos árboles secos que se encontraron en el camino, para evitar que fueran reconocidos y grabados por las cámaras de seguridad, los rijosos quienes también quemaron llantas para evitar las acciones de la fuerza pública en todo momento, se cubrieron el rostro.
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