ACAPULCO, Gro, (OEM).- Miembros de la Normal Rural de Ayotzinapa, de la Coordinadora estatal de Trabajadores de la Educación, del Frente Unido de Normales Públicas y otras organizaciones que se han solidarizado con su movimiento, sustrajeron productos diversos de vehículos de empresas y los repartieron a los transeúntes en diversos puntos. Algunos rechazaron lo ofrecido por ser de dudosa procedencia.
Los normalistas se instalaron en la zona conocida como Tierras Prietas, al norte de la ciudad, ahí decomisaron un camión cargado de abarrotes, un trailer de doble semi-rremolque con refrescos, una camioneta de helados Holanda, una de agua Bonafont, otra de Leche Lala y una más de Marinela, mismos que fueron llevados a tres puntos.
Una parte a la Avenida Insurgentes, en el punto conocido como Las Parotas, donde abrieron los vehículos, bajaron la carga y repartieron todo entre los transeúntes que se arremolinaron alrededor.
Otro punto donde se descargaron productos fue en la Alameda Francisco Granados Maldonado, sitio en el que algunas personas les expresaron que confiaban en que encuentren a sus compañeros desaparecidos.
El tercer punto fue en el estacionamiento de la tienda Aurrera, donde se colocó el enorme trailer y la gente utilizó los carritos para llevarse cajas de refrescos.
Por su parte, los maestros de la CETEG empezaron su acción posesionándose de la caseta de Palo Blanco, en la Autopista del Sol, ahí detuvieron vehículos de empresas, y empezaron por descargar uno que transportaba productos de pastelería, de tal forma que los profesores se llevaron bultos de harina, cajas de mantequilla, levadura, crema chantilly, manteca y otros insumos para la elaboración de pasteles.
Después, tomaron otras unidades de carga que se llevaron hasta el zócalo y allá se hizo la distribución entre la población de productos cárnicos, como salchicha, jamón, salami, entre otros.
Sin embargo, algunos no aceptaron los productos debido a que provenían del robo a empresas donde laboran cientos de empleados y optaron por dejar con las manos estiradas a los maestros y normalistas.
Sobre la Avenida Insurgentes, algunas personas a las que les entregaban productos a cambio de una cooperación, rechazaron los productos que les daban debido a que no es la manera en que deben protestar por la desaparición de 43 normalistas
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