Sin bajarse del "caballo de acero", dos sujetos dispararon en repetidas ocasiones a la víctima y un acompañante cuando platicaban en la calle; tras el cobarde asesinato, se dieron a la fuga, pero ya los buscan
Alvaro Velázquez,
LOS REYES LA PAZ, Méx.- Un hombre de 33 años de edad fue asesinado a balazos por dos sujetos que le dispararon en repetidas ocasiones desde una motoneta en marcha y que lo sorprendieron casi en la puerta de su domicilio, cuando daba instrucciones a uno de sus trabajadores, quien resultó lesionado, para que llevara a una casa de la zona un brincolín y juegos inflables que acababa de rentar para una fiesta infantil.
Mientras que el malogrado joven cayó casi instantáneamente muerto, en medio de un charco de sangre, los presuntos homicidas imprimieron velocidad a su motoneta para darse a la fuga y perderse entre las calles del lugar, sin que hasta el momento se sepa nada de su identidad y posible paradero, por lo que no se descarta que este crimen quede impune.
Los hechos que costaron la vida de quien fue identificado como Uriel Claudio Carrillo, de 33 años de edad, se registraron esta mañana, casi en la puerta de su domicilio, ubicado en la esquina de Emiliano Zapata y Libertad, en pleno centro de este municipio.
Familiares del ahora occiso que se encontraban completamente destrozados y que a grito abierto exigían justicia, revelaron a la policía que para ganarse la vida de manera honrada, Uriel se dedicaba la renta de brincolines y juegos inflables.
Esta mañana, dijeron, Uriel se encontraba casi en la puerta de su domicilio, en compañía de uno de sus trabajadores de nombre Bernardino García Herrera, de 34 años de edad, a quien le daba instrucciones para que llevara a una casa de la zona algunos juegos que le acababan de rentar para una fiesta infantil, cuando fue sorprendido por dos sujetos que viajaban en una motoneta, mismos que sacaron armas de fuego y sin mediar palabras le dispararon en repetidas ocasiones.
Al escuchar las detonaciones de armas de fuego, explicaron los indignados familiares, rápidamente salieron de la casa para saber qué había pasado y en ese momento presos del terror y la histeria se dieron cuenta que Uriel y su acompañante habían sido atacados a balazos y que se encontraban gravemente lesionados, por lo que de inmediato pidieron el auxilio de una ambulancia para que recibieran atención médica de urgencia.
Sin embargo, después que los tripulantes de la ambulancia 1607 de Protección Civil arribaron al lugar y brindaron los primeros auxilios a los baleados determinaron que desafortunadamente Uriel ya había muerto a consecuencia de los múltiples balazos que recibió, en tanto que su trabajador todavía estaba vivo, pero como su estado de salud era delicado rápidamente lo trasladaron al Hospital de La Perla, en Neza, donde los médicos luchan por salvarle la vida.
Policías ministeriales informaron que a pesar de que familiares del occiso aseguraron que desconocían los motivos por lo que fue asesinado de esa forma, pues aseguraron que era un hombre bueno y trabajador que se ganaba la vida rentando brincolines y juegos inflables, casi tienen la certeza de que por la forma en que se dieron los hechos que el ahora extinto posiblemente no andaba en buenos pasos y que pudo ser asesinado en una venganza de presuntos distribuidores de droga e incluso por algún problema personal.
En un intento por aclarar los hechos y lograr la identificación y captura de los responsables, policías ministeriales aseguraron que ya iniciaron las investigaciones correspondientes y confiaron en que conforme avancen los trabajos policiacos puedan resolver este caso.
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