Fotos: Sergio Vázquez
Solitario sujeto se acercó a los dos amigos que se encaminaban a la salida de la unidad habitacional y sin mediar palabra les disparó en varias ocasiones; venganza es la primera línea de investigación
Raúl Macías
"Yo los vi caer". Fue la declaración del vigilante de la Unidad Habitacional San Francisco 15, de la Colonia El Santuario, en Iztapalapa, cuando fue interrogado por elementos policiacos tras la ejecución a balazos de dos amigos que iban rumbo a la salida de ese lugar, pero que fueron interceptados por solitario sujeto que accionó su arma de fuego en varias ocasiones.
El miedo de que fuera a caer víctima de las balas del matón, el vigilante buscó un refugio y con ello salvó su vida, pero tuvo que dar aviso a las autoridades sobre lo ocurrido. Los cuerpos de los dos individuos quedaron uno cerca del otro y con varios impactos de bala en el cuerpo y cerca de ellos los casquillos percutidos.
La principal línea de investigación de la Procuraduría capitalina, apunta a que se trató de un ajuste de cuentas, porque de acuerdo al principal testigo ocular, no intercambió el homicida ninguna palabra con los hoy occisos, sino que en cuanto ingresó a la unidad, se les acercó y les comenzó a disparar para luego salir corriendo de la unidad sin que nadie pudiera detenerlo.
De estos hechos tomó conocimiento la Coordinación Territorial de IZP-6, quien al iniciar la averiguación previa, confirmó que estos hechos ocurrieron al filo de las 15:15 horas de ayer. Familiares de los occisos se presentaron en el lugar, pero se negaron a dar los nombres de estas personas, así como si tenían algún problema con algún vecino o en la colonia.
Agentes de investigación de la PGJDF se dieron a la tarea de localizar al homicida y también se encuentran checando entre los archivos de la dependencia si es que los occisos cuentan con algún ingreso a los penales capitalinos, pero hasta el cierre de esta edición se desconocía ese dato, pero sus huellas son analizadas en el sistema de la Procu capitalina, y así poder conocer a qué se dedicaban las víctimas.
Sus cuerpos fueron tarsladados al anfiteatro, y de acuerdo a versiones de los peritos, cada uno de los hombres, cuentan con al menos tres impactos de bala en el pecho, por lo que su muerte fue de manera instantánea.
Raúl Macías
"Yo los vi caer". Fue la declaración del vigilante de la Unidad Habitacional San Francisco 15, de la Colonia El Santuario, en Iztapalapa, cuando fue interrogado por elementos policiacos tras la ejecución a balazos de dos amigos que iban rumbo a la salida de ese lugar, pero que fueron interceptados por solitario sujeto que accionó su arma de fuego en varias ocasiones.
El miedo de que fuera a caer víctima de las balas del matón, el vigilante buscó un refugio y con ello salvó su vida, pero tuvo que dar aviso a las autoridades sobre lo ocurrido. Los cuerpos de los dos individuos quedaron uno cerca del otro y con varios impactos de bala en el cuerpo y cerca de ellos los casquillos percutidos.
La principal línea de investigación de la Procuraduría capitalina, apunta a que se trató de un ajuste de cuentas, porque de acuerdo al principal testigo ocular, no intercambió el homicida ninguna palabra con los hoy occisos, sino que en cuanto ingresó a la unidad, se les acercó y les comenzó a disparar para luego salir corriendo de la unidad sin que nadie pudiera detenerlo.
De estos hechos tomó conocimiento la Coordinación Territorial de IZP-6, quien al iniciar la averiguación previa, confirmó que estos hechos ocurrieron al filo de las 15:15 horas de ayer. Familiares de los occisos se presentaron en el lugar, pero se negaron a dar los nombres de estas personas, así como si tenían algún problema con algún vecino o en la colonia.
Agentes de investigación de la PGJDF se dieron a la tarea de localizar al homicida y también se encuentran checando entre los archivos de la dependencia si es que los occisos cuentan con algún ingreso a los penales capitalinos, pero hasta el cierre de esta edición se desconocía ese dato, pero sus huellas son analizadas en el sistema de la Procu capitalina, y así poder conocer a qué se dedicaban las víctimas.
Sus cuerpos fueron tarsladados al anfiteatro, y de acuerdo a versiones de los peritos, cada uno de los hombres, cuentan con al menos tres impactos de bala en el pecho, por lo que su muerte fue de manera instantánea.
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