Raúl Macías, Foto: Luis A. Barrera
Dos trabajadores del Sistema de Aguas de la Ciudad de México que viajaban en la parte trasera de un camión de carga, perdieron la vida luego de que les cayera encima una subestación eléctrica que era transportada a esa dependencia del gobierno del Distrito Federal; sus cuerpos quedaron bajo esa estructura metálica y nada pudieron hacer sus compañeros por ayudarles.
Información proporcionada por personal del Sacmex, refiere que Jesús González García y José Varela López, iban en la parte trasera del camión, justo a un costado de la subestación, pero en un movimiento brusco realizado por el conductor, el aparato se atoró con un cable de energía eléctrica y otro de una compañía telefónica, provocando que los trabajadores se cayeran.
Segundos después intentaron incorporarse, pero como se había zafado la estructura metálica, esta se les vino encima y los aplastó, ocasionándoles una muerte instantánea. Al escuchar el fuerte golpe de la subestación eléctrica contra el pavimento, el chofer del camión de carga detuvo su marcha y junto con otros compañeros fueron a ver lo ocurrido, llevándose una desagradable sorpresa.
Debajo del aparato señalado se encontraban los cuerpos de Jesús y José, pero no pudieron hacer nada por ayudarles, ya habían dejado de existir. Uno de los compañeros de los ahora occisos hizo un esfuerzo sobrehumano por intentar sacarlos de ahí; sin embargo, eran muchos kilos de peso y optó por rendirse, y no le quedó más que esperar a que llegaran los bomberos.
En cuestión de segundos el cruce de la calle Jacarandas y la Avenida División del Norte, en la Colonia Jardín, perímetro de la Delegación Coyoacán, se presentaron elementos policiacos, paramédicos y bomberos, así como el agente del ministerio público, para dar fe de los trágicos hechos que enlutaron dos hogares por un descuido de quien manejaba la pesada unidad.
Durante una entrevista de elementos policiacos a los trabajadores del Sacmex, estos les refirieron, que el aparato de energía eléctrica lo habían recogido en la zona de los tanques de Cuicuilco y que la orden era llevarlo a un campamento de la referida dependencia, pero que al ir circulando se atoró con cables de energía eléctrica y de un teléfono, lo que provocó que se cayeran sus compañeros.
Que instantes después de que cayeron a la cinta asfáltica los dos hombres, se les vino abajo la subestación y los aplastó, por ello tuvo que ser presentado ante el agente del ministerio público el conductor para deslindar responsabilidades, mientras que los bomberos con la utilización de maquinaria especial y una grúa, lograron rescatar los cuerpos que fueron enviados al anfiteatro delegacional
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