Raúl Macías, Foto: Rogelio Tinoco
Una camioneta por demás convertida en chatarra y que pertenece a la Delegación Iztapalapa, fue la protagonista de una tragedia, luego de que el conductor de esa unidad no respetó las luces del semáforo y al ir a exceso de velocidad terminó por arrollar a varias personas, de las cuales cuatro tuvieron que ser trasladadas a hospitales de la zona y al chofer ante el ministerio público.
Declaraciones dadas por vecinos del pueblo de Santa María Aztahuacán, en Iztapalapa, refieren que la noche del pasado lunes venían caminando por la calle Palmitas, cuando se encontraron con el conductor de una camioneta de la Delegación Iztapalapa con matrícula 918NWE, misma que era conducida a exceso de velocidad y sin ningún respeto al Reglamento de Tránsito.
Por lo que debido al exceso de velocidad su conductor perdió el control y atropelló a cuatro personas, dos hombres y dos mujeres, y siguió su camino hasta que llegó y se estampó contra la pared de una casa en donde finalmente se detuvo la camioneta, que a simple vista se aprecia que se encuentra en mal estado, además de que las llantas se le ven lisas por tanto uso y le faltan unos faros.
Cuando los familiares y amigos de las personas lesionadas se percataron que terminó su loca carrera estrellándose en una accesoria, se dirigieron hasta donde se encontraba el chofer para agarrarlo a golpes, pero en esos instantes arribaron elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, pero no lograban contener a los iracundos vecinos quienes querían hacerse justicia por propia mano.
Al ver que eran rebasados en número y que la vida del trabajador de la Delegación Iztapalapa se encontraba en riesgo, los uniformados pidieron por vía radio el apoyo del cuerpo de Granaderos para salvar al responsable del accidente. En cuanto bajaron de los camiones donde se les transportó, los efectivos policiacos comenzaron a replegar a los quejosos y se dieron conatos de enfrentamientos.
Aprovechando que existían las medidas de seguridad necesarias para su traslado, los uniformados llevaron de inmediato al chofer de la camioneta ante el agente del ministerio público para que respondiera de las lesiones provocadas a las cuatro personas, y se le pidió a los vecinos que se retiraran del lugar
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