Durante el rezo del ángelus, el Papa explicó la parábola de la viuda que suplica sin pausa al juez para conseguir justicia y entonces puso el ejemplo de tantas madres que luchan por sus hijos.
"Pienso en tantas mujeres, en todas las mujeres que rezan y que no se cansan nunca y que son testimonio de fe, valor y de modelo de oración", agregó el Pontífice argentino.
El Papa recordó que hoy se celebra en Argentina la fiesta de la madre y exclamó: "mando un saludo a todas las madres de mi tierra".
Bergoglio también expresó su cercanía hoy "a todos los misioneros y misioneras que trabajan tanto sin hacer ruido y dan la vida".
El Papa recordó a la italiana Afra Martinelli, "que durante tantos años trabajó en Nigeria y fue asesinada hace algunos días durante un robo", y a Stefano Sándor, "que ayer fue proclamado beato en Budapest y que afrontó la persecución con valor y fue asesinado a los 39 años de edad".
Además, El Papa Francisco saludó a los jovencitos que participaron en una carrera en el Vaticano y les dio las gracias por "recordarnos que el creyente es un atleta del espíritu".
Unos 5,000 jóvenes participaron en la prueba atlética titulada Cien Metros de Carrera de la Fe, organizada por el Vaticano para subrayar "los valores educativos, culturales y espirituales" del deporte.
"¡Gracias! Porque ustedes nos recuerdan que los creyentes son atletas del espíritu", declaró el Papa ante decenas de miles de personas congregadas en la Plaza San Pedro para el rezo del Angelus.
La carrera de tres horas, que tuvo lugar en la Vía de la Conciliación, se desarrolló "en un clima de oración", y los participantes "corrieron para llevar su mensaje de fe y esperanza al mundo", según el Consejo para la Cultura del Vaticano.
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