Para los antiguos mexicanos la oposición entre muerte y vida no era tan absoluta como para nosotros. La vida se prolongaba en la muerte. Y a la inversa. La muerte no era el fin natural de la vida, sino fase de un ciclo infinito. Vida, muerte y resurrección eran estadios de un proceso cósmico, que se repetía insaciable. La vida no tenía función más alta que desembocar en la muerte, su contrario y complemento; y la muerte, a su vez, no era un fin en sí; el hombre alimentaba con su muerte la voracidad de la vida, siempre insatisfecha".
"Todos Santos, Día de Muertos". Octavio Paz.
- La ofrenda que se presenta los días primero y dos de noviembre constituye un homenaje a un visitante distinguido.
- El Día de Muertos es el reflejo del sincretismo de dos culturas: la indígena y la hispana.
- La celebración de Todos los Santos y Fieles Difuntos, se ha mezclado con la conmemoración del día de muertos que los indígenas festejan desde los tiempos prehispánicos.
- Día en que las almas de los muertos tienen permiso para regresar al mundo de los vivos.
- La celebración del Día de Muertos, como se le conoce popularmente, se practica a todo lo largo de la República Mexicana.
- Entre los antiguos pueblos nahuas, después de la muerte, el alma viajaba a otros lugares para seguir viviendo.
- Con nuestros muertos también llega su majestad la Muerte; baja a la tierra y convive con los mexicanos y con las muchas culturas indígenas que hay en nuestra República.
- En las ofrendas se emplean también ornatos como las flores, papel picado, velas amarillas, calaveras de azúcar, los sahumadores en los que se quema el copal .
- Las almas de los parientes fallecidos regresan a casa para convivir con los familiares vivos.
- Nuestras celebraciones tienen arraigo y recorren los caminos del campo y la ciudad.
- La celebración de Día de Muertos es una celebración a la memoria.
- El ritual de Día de Muertos conlleva una enorme trascendencia popular, su celebración comprende muy diversos aspectos, desde los filosóficos hasta los materiales.
- El día primero está dedicado a Todos los Santos y el día dos a los Fieles Difuntos.
- Fiesta, en carnaval de olores, gustos y amores en el que los vivos y los muertos conviven.
- El ritual que reúne a los vivos con sus parientes, los que murieron.
- La ofrenda se compone, entre otras cosas, del típico pan de muerto, calabaza en tacha y platillos de la culinaria mexicana que en vida fueron de la preferencia del difunto.
- El país y su gente se visten de muchos colores para venerar la muerte: el amarillo de la flor de zempoalxóchitl, el blanco del alhelí, el rojo de la flor afelpada llamada pata de león.
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