Noel F. Alvarado, Foto: Sergio Vázquez
Granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, replegaron y encapsularon a decenas de presuntos anarquistas en el Hemiciclo a Juárez, que marchaban e intentaban ingresar al Zócalo capitalino, para protestar por el encarcelamiento de su compañero Mario González.
Así, la fuerza pública evitó que los presuntos anarquistas llegaran a Plaza de la Constitución, para manifestarse y exigir a las autoridades del gobierno de la ciudad de México, la libertad de su compañero anarco.
En medio de protestas por la agresión de los policías, los jóvenes gritaron consignas y marchaban hacia las instalaciones del gobierno del Distrito Federal para protestar porque su compañero Mario González sigue preso; él fue detenido el pasado 2 de octubre tras los acontecimientos violentos durante la marcha para conmemorar un aniversario más del movimiento estudiantil de 68.
Los antecedentes señalan que el detenido se trasladaba a la tradicional movilización en memoria de la matanza de Tlatelolco, en el DF, en un transporte público.
Tras su detención, Mario González se puso en huelga de hambre y se informó que su estado de salud es grave, sus órganos se empiezan a deteriorar y los daños pueden ser irreversibles.
Granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública del DF, replegaron y encapsularon a decenas de presuntos anarquistas en el Hemiciclo a Juárez, que marchaban e intentaban ingresar al Zócalo capitalino, para protestar por el encarcelamiento de su compañero Mario González.
Así, la fuerza pública evitó que los presuntos anarquistas llegaran a Plaza de la Constitución, para manifestarse y exigir a las autoridades del gobierno de la ciudad de México, la libertad de su compañero anarco.
En medio de protestas por la agresión de los policías, los jóvenes gritaron consignas y marchaban hacia las instalaciones del gobierno del Distrito Federal para protestar porque su compañero Mario González sigue preso; él fue detenido el pasado 2 de octubre tras los acontecimientos violentos durante la marcha para conmemorar un aniversario más del movimiento estudiantil de 68.
Los antecedentes señalan que el detenido se trasladaba a la tradicional movilización en memoria de la matanza de Tlatelolco, en el DF, en un transporte público.
Tras su detención, Mario González se puso en huelga de hambre y se informó que su estado de salud es grave, sus órganos se empiezan a deteriorar y los daños pueden ser irreversibles.
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