Raúl Macías
La gente ya no puede con tantos aumentos. Mañana, tras el brindis y las 12 uvas, los mexicanos volverán a la cruda realidad, pues el 2014 llegará acompañado de una serie de nuevos gravámenes aprobados por el Congreso de la Unión, como parte de la miscelánea fiscal. Destaca el impuesto a refrescos, comida chatarra, la homologación del IVA en las fronteras, y el incremento al ISR, entre otros. La cuesta de enero se prevé muy pesada.
A partir de mañana aumenta el pago del impuesto sobre la renta (ISR), el cual quedó de la siguiente manera: de 30 por ciento para las personas físicas que ganen hasta 750,000 pesos; pagarán el 32 quienes ganen más de esa cantidad. Para quienes tengan ingresos de más de 1.000,000 de pesos tendrán que pagar el 34 de ISR y para quienes ganen más de 3.000,000, el impuesto será de 35 por ciento.
Uno de los más controvertidos es el impuesto a la comida y la venta de mascotas, el cual fue cuestionado severamente por las agrupaciones protectoras de animales; costará 16 por ciento más el próximo año.
Otro nuevo impuesto es el gravamen a los refrescos y bebidas azucaradas, por lo que los consumidores pagarán 1 peso más por litro de bebida saborizada, en lo que se incluyen también los concentrados que contengan cualquier tipo de azúcares añadidas, como polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores, que al diluirse permitan obtener bebidas saborizadas.
Y con la finalidad de frenar la epidemia de obesidad en el país se aprobó el aumento al impuesto a "alimentos chatarra", por lo que se incrementó a 8 por ciento el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a alimentos con alto valor calórico, que contengan 275 kilocalorías o mayor por cada 100 gramos, un como dulces, confites, bombones, chocolates, nieves y helados, galletas y pastas alimenticias, cerveza y refrescos embotellados.
También incluye el pan de dulce debido a que tiene azúcar, pero los panes como el bolillo, birote y chapata y la tortilla o alimentos para bebés y lactantes quedaron excluidos.
Mas gasolinazos
Sorprendió que se fijarán en el chicle que deja de tener un tasa cero porque no es un alimento, y pagará un gravamen de 16 por ciento de IVA.
También causó molestia la aplicación del IVA al transporte terrestre foráneo. Quedaron exentos los trenes y transporte en las zonas urbanas, suburbanas o en zonas metropolitanas.
Una de las medidas que causó molestia entre quienes viven y se desarrollan económicamente en las fronteras, fue la homologación del IVA, al pasar del 11 al 16 por ciento.
Se grava la turbosina utilizada en aviones y otros querosenos que pagarán nuevas cuotas en el IEPS, que ahora será de 12.40 pesos por litro.
Los llamados gasolinazos continuarán, y cada mes subirá 6 centavos la gasolina magna y 8 centavos la premium.
La gente ya no puede con tantos aumentos. Mañana, tras el brindis y las 12 uvas, los mexicanos volverán a la cruda realidad, pues el 2014 llegará acompañado de una serie de nuevos gravámenes aprobados por el Congreso de la Unión, como parte de la miscelánea fiscal. Destaca el impuesto a refrescos, comida chatarra, la homologación del IVA en las fronteras, y el incremento al ISR, entre otros. La cuesta de enero se prevé muy pesada.
Uno de los más controvertidos es el impuesto a la comida y la venta de mascotas, el cual fue cuestionado severamente por las agrupaciones protectoras de animales; costará 16 por ciento más el próximo año.
Otro nuevo impuesto es el gravamen a los refrescos y bebidas azucaradas, por lo que los consumidores pagarán 1 peso más por litro de bebida saborizada, en lo que se incluyen también los concentrados que contengan cualquier tipo de azúcares añadidas, como polvos, jarabes, esencias o extractos de sabores, que al diluirse permitan obtener bebidas saborizadas.
Y con la finalidad de frenar la epidemia de obesidad en el país se aprobó el aumento al impuesto a "alimentos chatarra", por lo que se incrementó a 8 por ciento el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) a alimentos con alto valor calórico, que contengan 275 kilocalorías o mayor por cada 100 gramos, un como dulces, confites, bombones, chocolates, nieves y helados, galletas y pastas alimenticias, cerveza y refrescos embotellados.
También incluye el pan de dulce debido a que tiene azúcar, pero los panes como el bolillo, birote y chapata y la tortilla o alimentos para bebés y lactantes quedaron excluidos.
Mas gasolinazos
Sorprendió que se fijarán en el chicle que deja de tener un tasa cero porque no es un alimento, y pagará un gravamen de 16 por ciento de IVA.
También causó molestia la aplicación del IVA al transporte terrestre foráneo. Quedaron exentos los trenes y transporte en las zonas urbanas, suburbanas o en zonas metropolitanas.
Una de las medidas que causó molestia entre quienes viven y se desarrollan económicamente en las fronteras, fue la homologación del IVA, al pasar del 11 al 16 por ciento.
Se grava la turbosina utilizada en aviones y otros querosenos que pagarán nuevas cuotas en el IEPS, que ahora será de 12.40 pesos por litro.
Los llamados gasolinazos continuarán, y cada mes subirá 6 centavos la gasolina magna y 8 centavos la premium.
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