Raúl Macías, Foto: Luis A. Barrera
En lo que al parecer se trata de un ajuste de cuentas, elementos de la policía capitalina acudieron a un llamado de vecinos de la Colonia 25 de Julio en la Delegación Gustavo A. Madero, luego que se reportara que del interior de una camioneta salía humo y tras sofocar el fuego en el asiento delantero fue encontrado el cuerpo semicalcinado de un hombre de 39 años de edad.
De acuerdo a las primeras investigaciones, la tarde de ayer se reportó que en la calle Gran Canal y Emiliano Zapata de la referida colonia, se encontraba una camioneta negra, Explorer con placas de circulación 611-PTH, que se estaba quemando.
Para evitar que se registrara una explosión si el fuego llegaba hasta el tanque de la gasolina, se dio aviso a los "tragahumo".
Cuando los elementos de la policía capitalina hicieron su arribo, de inmediato resguardaron la zona e impidieron a los curiosos que se acercaran más, para evitar una tragedia.
Momentos después llegaron los bomberos y controlaron el siniestro, por lo que se esperaron a que el agente del ministerio público se presentara en el lugar y procediera a realizar las primeras investigaciones.
Fue entonces que los peritos pudieron abrir la camioneta y se percataron que en el asiento delantero se encontraba un hombre que fue identificado como Carlos Edgardo Araiza Nieto, de 39 años de edad.
Según las primeras versiones de los investigadores, la víctima presentaba un impacto de bala y tras haber sido ultimado, sus verdugos le colocaron encima una cobija a la que le prendieron fuego y luego huyeron del lugar.
Gracias a la oportuna intervención de los bomberos, se evitó que el cuerpo de Carlos Edgardo fuera consumido por las llamas.
Esto permitió que los investigadores encontraran intacta una identificación de este hombre, por lo que se dieron a la tarea de localizar a los familiares y darles cuenta de los hechos, porque los vecinos de la Colonia 25 de Julio dijeron que no era de esta zona.
En un principio se rumoró que eran dos las personas cuyos cuerpos se encontraban semicalcinados en el interior de la camioneta, pero la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmó que solamente se trató de una persona, la cual fue trasladada a las instalaciones de la agencia del ministerio público en la Delegación Gustavo A. Madero.
Será en las próximas horas cuando las autoridades puedan conocer las causas reales del crimen, porque hasta el momento la única línea viable de investigación, es que se trató de un ajuste de cuentas, debido a que la víctima tenía sus pertenencias.
En lo que al parecer se trata de un ajuste de cuentas, elementos de la policía capitalina acudieron a un llamado de vecinos de la Colonia 25 de Julio en la Delegación Gustavo A. Madero, luego que se reportara que del interior de una camioneta salía humo y tras sofocar el fuego en el asiento delantero fue encontrado el cuerpo semicalcinado de un hombre de 39 años de edad.
De acuerdo a las primeras investigaciones, la tarde de ayer se reportó que en la calle Gran Canal y Emiliano Zapata de la referida colonia, se encontraba una camioneta negra, Explorer con placas de circulación 611-PTH, que se estaba quemando.
Para evitar que se registrara una explosión si el fuego llegaba hasta el tanque de la gasolina, se dio aviso a los "tragahumo".
Cuando los elementos de la policía capitalina hicieron su arribo, de inmediato resguardaron la zona e impidieron a los curiosos que se acercaran más, para evitar una tragedia.
Momentos después llegaron los bomberos y controlaron el siniestro, por lo que se esperaron a que el agente del ministerio público se presentara en el lugar y procediera a realizar las primeras investigaciones.
Fue entonces que los peritos pudieron abrir la camioneta y se percataron que en el asiento delantero se encontraba un hombre que fue identificado como Carlos Edgardo Araiza Nieto, de 39 años de edad.
Según las primeras versiones de los investigadores, la víctima presentaba un impacto de bala y tras haber sido ultimado, sus verdugos le colocaron encima una cobija a la que le prendieron fuego y luego huyeron del lugar.
Gracias a la oportuna intervención de los bomberos, se evitó que el cuerpo de Carlos Edgardo fuera consumido por las llamas.
Esto permitió que los investigadores encontraran intacta una identificación de este hombre, por lo que se dieron a la tarea de localizar a los familiares y darles cuenta de los hechos, porque los vecinos de la Colonia 25 de Julio dijeron que no era de esta zona.
En un principio se rumoró que eran dos las personas cuyos cuerpos se encontraban semicalcinados en el interior de la camioneta, pero la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) confirmó que solamente se trató de una persona, la cual fue trasladada a las instalaciones de la agencia del ministerio público en la Delegación Gustavo A. Madero.
Será en las próximas horas cuando las autoridades puedan conocer las causas reales del crimen, porque hasta el momento la única línea viable de investigación, es que se trató de un ajuste de cuentas, debido a que la víctima tenía sus pertenencias.
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