Noel F. Alvarado, Foto: Luis A. Barrera
Un hombre de la tercera edad falleció a consecuencia de un infarto fulminante en los momentos en que viajaba en una bicicleta; autoridades ministeriales, periciales y agentes de la Policía Investigadora, realizaron la inspección ocular, para luego, trasladar el cadáver al anfiteatro de la fiscalía en Azcapotzalco.
Este homicidio ocurrió en los momentos en que el adulto mayor viajaba en una bicicleta en la Glorieta de Camarones en la Avenida Cuitláhuac del perímetro de la Delegación Azcapotzalco.
Algunos testigos declararon a la policía que observaron cuando un hombre viajaba a bordo de una bicicleta y al circular por ese lugar, repentinamente cayó con todo y bicicleta.
Los transeúntes, procedieron a tratar de auxiliarlo al pensar que la caída era por alguna falla en el manejo, pero ya no reaccionaba.
Debido a ello, los testigos de inmediato solicitaron la intervención de personal de los cuerpos de socorro y de la policía.
Nada pudieron hacer los socorristas de la Cruz Roja y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, debido a que cuando revisaron el cuerpo diagnosticaron que ya había dejado de existir a consecuencia de un infarto al miocardio.
A la escena del homicidio, acudieron autoridades ministeriales, periciales y agentes de la Policía Investigadora, mismos que se dieron a la tarea de realizar la inspección ocular, para luego, trasladar el cuerpo al anfiteatro de la fiscalía en Azcapotzalco, donde continúan las indagaciones.
Un hombre de la tercera edad falleció a consecuencia de un infarto fulminante en los momentos en que viajaba en una bicicleta; autoridades ministeriales, periciales y agentes de la Policía Investigadora, realizaron la inspección ocular, para luego, trasladar el cadáver al anfiteatro de la fiscalía en Azcapotzalco.
Este homicidio ocurrió en los momentos en que el adulto mayor viajaba en una bicicleta en la Glorieta de Camarones en la Avenida Cuitláhuac del perímetro de la Delegación Azcapotzalco.
Algunos testigos declararon a la policía que observaron cuando un hombre viajaba a bordo de una bicicleta y al circular por ese lugar, repentinamente cayó con todo y bicicleta.
Los transeúntes, procedieron a tratar de auxiliarlo al pensar que la caída era por alguna falla en el manejo, pero ya no reaccionaba.
Debido a ello, los testigos de inmediato solicitaron la intervención de personal de los cuerpos de socorro y de la policía.
Nada pudieron hacer los socorristas de la Cruz Roja y del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, debido a que cuando revisaron el cuerpo diagnosticaron que ya había dejado de existir a consecuencia de un infarto al miocardio.
A la escena del homicidio, acudieron autoridades ministeriales, periciales y agentes de la Policía Investigadora, mismos que se dieron a la tarea de realizar la inspección ocular, para luego, trasladar el cuerpo al anfiteatro de la fiscalía en Azcapotzalco, donde continúan las indagaciones.
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