Raúl Macías
Confiada en que su pequeña se encontraba en "buenas manos", una mujer cuyo trabajo le impedía estar al pendiente de su hija, se llevó una desagradable noticia cuando supo que su niña de un año y cuatro meses había sido llevada al Hospital Materno Infantil de Cuautepec, en la Delegación Gustavo A. Madero, en donde se le notificó que sus "cuidadores" la golpeaban y esta vez se les pasó la mano y la mataron.
El fiscal Desconcentrado de Investigación en Gustavo A. Madero, Juan Díaz Salinas, detalló que les fue informado por médicos del Hospital Materno Infantil de Cuautepec, que al área de urgencias fue llevada una niña por una mujer que manifestó responder al nombre de Maritza Ramírez García, refiriendo la fémina que la infante se había caído.
La menor llegó ya sin signos vitales, por lo que se le dio aviso a la mamá de la niña para que acudiera a reconocer sus restos, mientras que Maritza Ramírez se encontraba a disposición del agente ministerial, hasta que se conocieran las causas reales del deceso de la menor. Y la progenitora de la criatura dijo que ella trabaja hasta muy tarde, por lo que se la dejaba a su cuidado.
Tras la realización de estudios y la necropsia de ley, se conoció que la niña presentaba el síndrome de Kempe, es decir, que sufría de maltrato frecuente por parte de Maritza Ramírez, quien al ser cuestionada por las autoridades reconoció que ella y su pareja sentimental, José Luis Francisco Hernández, la agredían, por esta vez se les pasó la mano y le causaron la muerte.
En primera instancia, la mujer cuando la llevó al hospital aseguraba que la pequeña se había caído y que ella la tenía bajo su cuidado, pero posteriormente quedó al descubierto que constantemente era golpeada, y todo parece indicar que el motivo era porque lloraba mucho y eso molestaba a José Luis, quien a decir de su mujer, era quien agredía a la infante para que dejara de lloriquear.
Al conocer la acusación directa de Maritza, elementos de la Policía de Investigación se trasladaron hasta el domicilio de la pareja y ahí se logró el aseguramiento de José Luis Francisco Hernández, quien ya fue enviado al Reclusorio Norte, mientras que a Maritza Ramírez García la ingresaron al Centro Femenil de Readaptación Social Santa Martha Acatitla, como probables responsables del delito de homicidio.
Confiada en que su pequeña se encontraba en "buenas manos", una mujer cuyo trabajo le impedía estar al pendiente de su hija, se llevó una desagradable noticia cuando supo que su niña de un año y cuatro meses había sido llevada al Hospital Materno Infantil de Cuautepec, en la Delegación Gustavo A. Madero, en donde se le notificó que sus "cuidadores" la golpeaban y esta vez se les pasó la mano y la mataron.
El fiscal Desconcentrado de Investigación en Gustavo A. Madero, Juan Díaz Salinas, detalló que les fue informado por médicos del Hospital Materno Infantil de Cuautepec, que al área de urgencias fue llevada una niña por una mujer que manifestó responder al nombre de Maritza Ramírez García, refiriendo la fémina que la infante se había caído.
La menor llegó ya sin signos vitales, por lo que se le dio aviso a la mamá de la niña para que acudiera a reconocer sus restos, mientras que Maritza Ramírez se encontraba a disposición del agente ministerial, hasta que se conocieran las causas reales del deceso de la menor. Y la progenitora de la criatura dijo que ella trabaja hasta muy tarde, por lo que se la dejaba a su cuidado.
Tras la realización de estudios y la necropsia de ley, se conoció que la niña presentaba el síndrome de Kempe, es decir, que sufría de maltrato frecuente por parte de Maritza Ramírez, quien al ser cuestionada por las autoridades reconoció que ella y su pareja sentimental, José Luis Francisco Hernández, la agredían, por esta vez se les pasó la mano y le causaron la muerte.
En primera instancia, la mujer cuando la llevó al hospital aseguraba que la pequeña se había caído y que ella la tenía bajo su cuidado, pero posteriormente quedó al descubierto que constantemente era golpeada, y todo parece indicar que el motivo era porque lloraba mucho y eso molestaba a José Luis, quien a decir de su mujer, era quien agredía a la infante para que dejara de lloriquear.
Al conocer la acusación directa de Maritza, elementos de la Policía de Investigación se trasladaron hasta el domicilio de la pareja y ahí se logró el aseguramiento de José Luis Francisco Hernández, quien ya fue enviado al Reclusorio Norte, mientras que a Maritza Ramírez García la ingresaron al Centro Femenil de Readaptación Social Santa Martha Acatitla, como probables responsables del delito de homicidio.
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