Genoveva Ortiz
Senadores del PRI, PAN y PVEM que integran las comisiones dictaminadoras de la reforma energética aprobaron las leyes secundarias de la Industria Eléctrica y de Energía Geotérmica, así como adiciones y cambios a diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales.
En una hora y sin discusión, las comisiones unidas de Energía y Estudios Legislativos, Primera, aprobaron ayer las cuatro leyes en mención, con ausencia del PRD y PT, que se ausentaron de la discusión desde la tarde del viernes pasado.
Al inicio del encuentro, con la asistencia de los senadores del PRI, PAN y PVEM y la ausencia del PRD y del PT, el senador David Penchyna Grub recordó que en la sesión anterior, con el respaldo de los integrantes de las comisiones presentes, se votó que el primer dictamen relativo a la Ley de Hidrocarburos se encontraba suficientemente discutido en lo general y en lo particular.
Además, dijo que el pasado 12 de junio se remitió a los senadores dos proyectos de dictámenes sobre las iniciativas que expiden la Ley de la Industria Eléctrica y la Ley de Energía Geotérmica, así como para adicionar y reformar diversas disposiciones de la Ley de Aguas Nacionales, por lo que en la reunión de ayer se aprobó integrar las dos propuestas en un solo proyecto de dictamen.
El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Primera, Raúl Gracia Guzmán, informó que las presidencias de las comisiones unidas solicitaron a la Mesa Directiva del Senado de la República su opinión sobre la legalidad o no del acuerdo que rige el procedimiento para dictaminar las leyes en materia energética.
Al fijar la postura del Partido Revolucionario Institucional sobre el dictamen, el senador Héctor Yunes Landa advirtió que los altos precios de la energía eléctrica, además de representar un lastre para las familias mexicanas, restan competitividad a la economía nacional.
Dijo que no obstante los elevados montos de las tarifas de luz, la industria eléctrica, para evitar montos mayores de los que ya se cobran, requiere fuertes subsidios, en detrimento del presupuesto federal. Sólo el año pasado, destacó, requirió de más de 85,000 millones de pesos en subsidios, equivalente en más de 700 pesos por cada mexicano.
Bajo las condiciones en la que opera el sistema eléctrico nacional, afirmó, la energía que utilizan millones de familias terminará siendo impagable y seguir bajo el mismo esquema de operación nos llevará a un escenario nada deseable: tarifas más altas y presupuestos oficiales que no alcanzarán para subsidiar los recibos de la energía eléctrica, por lo que esto debe cambiar.
En una hora y sin discusión, las comisiones unidas de Energía y Estudios Legislativos, Primera, aprobaron ayer las cuatro leyes en mención, con ausencia del PRD y PT, que se ausentaron de la discusión desde la tarde del viernes pasado.
Al inicio del encuentro, con la asistencia de los senadores del PRI, PAN y PVEM y la ausencia del PRD y del PT, el senador David Penchyna Grub recordó que en la sesión anterior, con el respaldo de los integrantes de las comisiones presentes, se votó que el primer dictamen relativo a la Ley de Hidrocarburos se encontraba suficientemente discutido en lo general y en lo particular.
El presidente de la Comisión de Estudios Legislativos, Primera, Raúl Gracia Guzmán, informó que las presidencias de las comisiones unidas solicitaron a la Mesa Directiva del Senado de la República su opinión sobre la legalidad o no del acuerdo que rige el procedimiento para dictaminar las leyes en materia energética.
Dijo que no obstante los elevados montos de las tarifas de luz, la industria eléctrica, para evitar montos mayores de los que ya se cobran, requiere fuertes subsidios, en detrimento del presupuesto federal. Sólo el año pasado, destacó, requirió de más de 85,000 millones de pesos en subsidios, equivalente en más de 700 pesos por cada mexicano.
Bajo las condiciones en la que opera el sistema eléctrico nacional, afirmó, la energía que utilizan millones de familias terminará siendo impagable y seguir bajo el mismo esquema de operación nos llevará a un escenario nada deseable: tarifas más altas y presupuestos oficiales que no alcanzarán para subsidiar los recibos de la energía eléctrica, por lo que esto debe cambiar.
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