Alvaro Velázquez
TLALNEPANTLA, Méx.- Destazado y completamente quemado dentro de un bote de 200 litros fue encontrado esta madrugada en un paraje del municipio de Zinacantepec, el cadáver del coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros de la PGJEM, quien había sido secuestrado el pasado sábado por un grupo de delincuentes que exigían 9 millones de pesos a cambio de su liberación.
Al respecto, trascendió que en torno a este lamentable caso, la PGJEM ya abrió una línea de investigación, pues existen indicios de que el ahora occiso en realidad no fue secuestrado y que sus verdugos aparentaron un plagio, pero que en realidad lo levantaron y asesinaron en una venganza por un supuesto "baile" que cometió contra ellos la Fiscalía de Secuestros con sede en Tlalnepantla por un secuestro que estos sujetos cometieron en el mismo municipio de Tlalnepantla, "negociación que no cumplieron".
Aunque la PGJEM se mostró sumamente hermética en torno a este caso, se supo que la noche del pasado sábado, al salir de su oficina para dirigirse a su domicilio a bordo de su automóvil, el coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros de la PGJEM, Fernando Cruz, fue interceptado por varios sujetos fuertemente armados, quienes bajo amenazas de muerte y de manera violenta, lo subieron a una camioneta para llevárselo secuestrado rumbo a una casa de seguridad, ubicada en la ciudad de Toluca.
Posteriormente, los presuntos secuestradores entablaron comunicación vía telefónica con los familiares del servidor público de la PGJEM para informarles que lo tenían plagiado y que si desean verlo con vida de nueva cuenta tenían que pagar 9 millones de pesos por su liberación.
A pesar de que los afectados en todo momento negociaron e incluso juntaron 3 millones de pesos para liberar a su familiar, los presuntos secuestradores no aceptaron y mantuvieron su posición de que querían 9 millones de pesos.
La mañana de ayer, luego de mantener una nueva negociación, los presuntos plagiarios aceptaron los 3 millones; sin embargo, como sabían que más de 100 elementos de la Policía Ministerial ya los buscaban y sólo esperaban que cometieran un error, indicaron a los familiares del afectado que el pago del rescate sería en un paraje del municipio de Zinacantepec. Pero cuando elementos de la Policía Ministerial se trasladaron al lugar junto con los familiares y esperaban a que los delincuentes cobraran para rodearlos y detenerlos, grande fue su sorpresa cuando descubrieron que dichos sujetos se habían burlado de todos y que los llevaron a la zona únicamente para que encontraran el cadáver destazado, completamente quemado y dentro de un tambo de 200 litros de capacidad, del servidor público.
Al considerar que el asesinato del coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros, representó una burla, una ofensa y hasta un reto para la PGJEM, la Procuraduría mexiquense ya ordenó y comisionó a más de 100 elementos de la Policía Ministerial para que inicien con los trabajos de investigación correspondientes y trabajen a marchas forzadas hasta que resuelvan el crimen y logren la identificación y captura de los responsables, sean quien sean, pues, a diferencia de otros casos, afirmó que este asesinato no puede ni debe de quedar impune por la brutalidad con que se cometió y porque la víctima "era de casa".
TLALNEPANTLA, Méx.- Destazado y completamente quemado dentro de un bote de 200 litros fue encontrado esta madrugada en un paraje del municipio de Zinacantepec, el cadáver del coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros de la PGJEM, quien había sido secuestrado el pasado sábado por un grupo de delincuentes que exigían 9 millones de pesos a cambio de su liberación.
Aunque la PGJEM se mostró sumamente hermética en torno a este caso, se supo que la noche del pasado sábado, al salir de su oficina para dirigirse a su domicilio a bordo de su automóvil, el coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros de la PGJEM, Fernando Cruz, fue interceptado por varios sujetos fuertemente armados, quienes bajo amenazas de muerte y de manera violenta, lo subieron a una camioneta para llevárselo secuestrado rumbo a una casa de seguridad, ubicada en la ciudad de Toluca.
Posteriormente, los presuntos secuestradores entablaron comunicación vía telefónica con los familiares del servidor público de la PGJEM para informarles que lo tenían plagiado y que si desean verlo con vida de nueva cuenta tenían que pagar 9 millones de pesos por su liberación.
A pesar de que los afectados en todo momento negociaron e incluso juntaron 3 millones de pesos para liberar a su familiar, los presuntos secuestradores no aceptaron y mantuvieron su posición de que querían 9 millones de pesos.
La mañana de ayer, luego de mantener una nueva negociación, los presuntos plagiarios aceptaron los 3 millones; sin embargo, como sabían que más de 100 elementos de la Policía Ministerial ya los buscaban y sólo esperaban que cometieran un error, indicaron a los familiares del afectado que el pago del rescate sería en un paraje del municipio de Zinacantepec. Pero cuando elementos de la Policía Ministerial se trasladaron al lugar junto con los familiares y esperaban a que los delincuentes cobraran para rodearlos y detenerlos, grande fue su sorpresa cuando descubrieron que dichos sujetos se habían burlado de todos y que los llevaron a la zona únicamente para que encontraran el cadáver destazado, completamente quemado y dentro de un tambo de 200 litros de capacidad, del servidor público.
Al considerar que el asesinato del coordinador de ministerios públicos del grupo antisecuestros, representó una burla, una ofensa y hasta un reto para la PGJEM, la Procuraduría mexiquense ya ordenó y comisionó a más de 100 elementos de la Policía Ministerial para que inicien con los trabajos de investigación correspondientes y trabajen a marchas forzadas hasta que resuelvan el crimen y logren la identificación y captura de los responsables, sean quien sean, pues, a diferencia de otros casos, afirmó que este asesinato no puede ni debe de quedar impune por la brutalidad con que se cometió y porque la víctima "era de casa".
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