Arturo R. Pansza
Las fracciones parlamentarias del PRI y PVEM en la Cámara de Diputados, recibieron la demanda del titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Jesús Murillo Karam, de concretar cuanto antes el marco legal de la Fiscalía General de la República, junto con un paquete de iniciativas para mejorar la impartición de justicia en el país.
Así, al participar en la V Reunión Plenaria de esas bancadas, previo al inicio del primer periodo ordinario de sesiones del último año de la actual LXII Legislatura, el próximo 1o. de septiembre, el abogado de la nación consideró necesario se resuelva la Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, que sustituirá a la PGR, con el propósito de dotarla de las armas necesarias y convertirla en la realidad legal.
Y declaró: "habrá que generar fundamentalmente para esto la creación de una Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, en donde se fijen y se finquen los principales aspectos de lo que debe tener la característica de esta fiscalía que en adelante será, ya no sólo autónoma en la forma relativa que lo es hoy, sino autónoma de lleno".
Murillo expuso que ese órgano autónomo requiere, para poder funcionar, terminar con la pluralidad de mandos y de cuerpos policiacos.
Refirió que "el procurador va a tener que recurrir a todas las policías, a las que están especializadas, a las que tienen capacidad y tendrá que hacerlo con la autoridad suficiente o se va a quedar sin manos o se va a quedar sin posibilidades de ejecución o no va a tener las posibilidades de ejecución o ejercer la función que le están señalando, de hacer valer la ley mediante el ejercicio de la acción penal, que estará limitado para ello en razón de la incapacidad de origen en el procedimiento".
Dio cuenta que en la Cámara de Diputados se ha trabajado para que la ley y la justicia sean líneas más paralelas, "puedan estar mucho más acercadas, lo que no siempre ocurre, lo que no siempre se da".
Pugnó por procurar que la autonomía que se le concede al ministerio público, tenga al mismo tiempo la fuerza necesaria para poder conducir la tarea crucial verdaderamente difícil de determinar qué conducta está tipificada en una ley y, sea sancionable, al mismo tiempo de entender las razones y las motivaciones, la circunstancia de esa conducta para poder aplicarlo con la ley un concepto y un criterio de justicia.
Insistió que se le tienen que dar a la Fiscalía las armas necesarias para poder cumplir con esa función y, al mismo tiempo, con todos los derechos que surjan, además de que deben estar pensadas en función de la facultad autónoma.
Argumentó que se enfrenta un problema desde hace varios años de una diversificación brutal de policías y de mandos, una fiscalía que va a tener un proceso distinto, que apenas se arma y que en dos años deberá estar perfectamente lista.
"Va a tener un problema serio, porque las nuevas condiciones de proceso exigen para que el juez pueda determinar la sentencia, tendrá que tener las evidencias que le permitan señalar la posibilidad", acotó.
Abundó que "esas evidencias las tienen que generar los cuerpos policiacos y esa diversidad de mandos y jerarquías va a obligarnos a encontrar mecanismos para que esa función policiaca sea cumplida a plenitud".
Así, al participar en la V Reunión Plenaria de esas bancadas, previo al inicio del primer periodo ordinario de sesiones del último año de la actual LXII Legislatura, el próximo 1o. de septiembre, el abogado de la nación consideró necesario se resuelva la Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, que sustituirá a la PGR, con el propósito de dotarla de las armas necesarias y convertirla en la realidad legal.
Y declaró: "habrá que generar fundamentalmente para esto la creación de una Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República, en donde se fijen y se finquen los principales aspectos de lo que debe tener la característica de esta fiscalía que en adelante será, ya no sólo autónoma en la forma relativa que lo es hoy, sino autónoma de lleno".
Murillo expuso que ese órgano autónomo requiere, para poder funcionar, terminar con la pluralidad de mandos y de cuerpos policiacos.
Refirió que "el procurador va a tener que recurrir a todas las policías, a las que están especializadas, a las que tienen capacidad y tendrá que hacerlo con la autoridad suficiente o se va a quedar sin manos o se va a quedar sin posibilidades de ejecución o no va a tener las posibilidades de ejecución o ejercer la función que le están señalando, de hacer valer la ley mediante el ejercicio de la acción penal, que estará limitado para ello en razón de la incapacidad de origen en el procedimiento".
Dio cuenta que en la Cámara de Diputados se ha trabajado para que la ley y la justicia sean líneas más paralelas, "puedan estar mucho más acercadas, lo que no siempre ocurre, lo que no siempre se da".
Pugnó por procurar que la autonomía que se le concede al ministerio público, tenga al mismo tiempo la fuerza necesaria para poder conducir la tarea crucial verdaderamente difícil de determinar qué conducta está tipificada en una ley y, sea sancionable, al mismo tiempo de entender las razones y las motivaciones, la circunstancia de esa conducta para poder aplicarlo con la ley un concepto y un criterio de justicia.
Insistió que se le tienen que dar a la Fiscalía las armas necesarias para poder cumplir con esa función y, al mismo tiempo, con todos los derechos que surjan, además de que deben estar pensadas en función de la facultad autónoma.
Argumentó que se enfrenta un problema desde hace varios años de una diversificación brutal de policías y de mandos, una fiscalía que va a tener un proceso distinto, que apenas se arma y que en dos años deberá estar perfectamente lista.
"Va a tener un problema serio, porque las nuevas condiciones de proceso exigen para que el juez pueda determinar la sentencia, tendrá que tener las evidencias que le permitan señalar la posibilidad", acotó.
Abundó que "esas evidencias las tienen que generar los cuerpos policiacos y esa diversidad de mandos y jerarquías va a obligarnos a encontrar mecanismos para que esa función policiaca sea cumplida a plenitud".
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