Foto: cortesía Ricardo Mendoza
Alvaro Velázquez
AMECAMECA, Méx.- Tras protagonizar una riña, al parecer por problemas de borrachos, con varios sujetos con quienes ingería bebidas embriagantes en la calle, muy cerca de su domicilio, un joven de 20 años de edad fue asesinado de certero balazo en la cabeza.
Mientras que el malogrado joven cayó instantáneamente muerto, en medio de un enorme charco de sangre, sus compañeros de parranda, entre los que figura el presunto homicida, se dieron a la fuga; sin embargo, como elementos de la Policía Ministerial ya cuentan con datos importantes de ellos, confiaron en que de un momento a otro, conforme avancen las investigaciones correspondientes, puedan ubicarlos y detenerlos.
Los hechos que costaron la vida de este joven, quien fue identificado como Alfredo Vega Rosales, de 20 años de edad, se registraron esta madrugada, en la esquina de las calles Rólex y Reforma, en pleno centro de este municipio.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron y por las versiones que dieron algunos de los vecinos, desde la noche de ayer observaron que el ahora occiso se encontraba en la calle ingiriendo bebidas embriagantes con varios sujetos, muy cerca de su casa.
"Serían como las dos de la mañana, cuando escuchamos gritos en la calle y luego nos dimos cuenta que dichos sujetos se estaban peleando y enseguida sobrevino una detonación de arma de fuego y cuando nos asomamos por las ventanas de nuestras casas para saber qué había pasado, nos dimos cuenta que Alfredo había sido atacado a balazos, por uno de sus compañeros de parranda, pues estaba tirado sobre el asfalto, en medio de un enorme charco de sangre", dijeron los vecinos a la policía.
Debido a que Alfredo no se movía, indicaron los testigos, de inmediato pidieron la intervención de una ambulancia de la Cruz Roja para que recibiera atención médica de urgencia, pero cuando los paramédicos arribaron al lugar y trataron de darle los primeros auxilios determinaron que ya no había nada que hacer, pues ya había muerto, a consecuencia de un balazo que presentaba en la cabeza, a la altura de la sien derecha.
Aunque en la escena del crimen los mismos vecinos dieron información importante a la policía de los presuntos homicidas y de que los uniformados implementaron un fuerte operativo en toda la zona para ubicarlos y detenerlos no tuvieron suerte, pues escaparon sin dejar pistas de su paradero.
Pero no obstante ello, elementos de la policía ministerial confiaron en que con la misma información que ya aportaron los testigos de los presuntos homicidas de un momento a otro puedan ubicarlos y detenerlos para ponerlos tras las rejas y de esta forma aclarar el crimen.
AMECAMECA, Méx.- Tras protagonizar una riña, al parecer por problemas de borrachos, con varios sujetos con quienes ingería bebidas embriagantes en la calle, muy cerca de su domicilio, un joven de 20 años de edad fue asesinado de certero balazo en la cabeza.
Mientras que el malogrado joven cayó instantáneamente muerto, en medio de un enorme charco de sangre, sus compañeros de parranda, entre los que figura el presunto homicida, se dieron a la fuga; sin embargo, como elementos de la Policía Ministerial ya cuentan con datos importantes de ellos, confiaron en que de un momento a otro, conforme avancen las investigaciones correspondientes, puedan ubicarlos y detenerlos.
Los hechos que costaron la vida de este joven, quien fue identificado como Alfredo Vega Rosales, de 20 años de edad, se registraron esta madrugada, en la esquina de las calles Rólex y Reforma, en pleno centro de este municipio.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo a las primeras investigaciones que se realizaron y por las versiones que dieron algunos de los vecinos, desde la noche de ayer observaron que el ahora occiso se encontraba en la calle ingiriendo bebidas embriagantes con varios sujetos, muy cerca de su casa.
"Serían como las dos de la mañana, cuando escuchamos gritos en la calle y luego nos dimos cuenta que dichos sujetos se estaban peleando y enseguida sobrevino una detonación de arma de fuego y cuando nos asomamos por las ventanas de nuestras casas para saber qué había pasado, nos dimos cuenta que Alfredo había sido atacado a balazos, por uno de sus compañeros de parranda, pues estaba tirado sobre el asfalto, en medio de un enorme charco de sangre", dijeron los vecinos a la policía.
Debido a que Alfredo no se movía, indicaron los testigos, de inmediato pidieron la intervención de una ambulancia de la Cruz Roja para que recibiera atención médica de urgencia, pero cuando los paramédicos arribaron al lugar y trataron de darle los primeros auxilios determinaron que ya no había nada que hacer, pues ya había muerto, a consecuencia de un balazo que presentaba en la cabeza, a la altura de la sien derecha.
Aunque en la escena del crimen los mismos vecinos dieron información importante a la policía de los presuntos homicidas y de que los uniformados implementaron un fuerte operativo en toda la zona para ubicarlos y detenerlos no tuvieron suerte, pues escaparon sin dejar pistas de su paradero.
Pero no obstante ello, elementos de la policía ministerial confiaron en que con la misma información que ya aportaron los testigos de los presuntos homicidas de un momento a otro puedan ubicarlos y detenerlos para ponerlos tras las rejas y de esta forma aclarar el crimen.
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