Patricia Carrasco
Con 65 ataúdes negros de cartón con una cruz blanca, trabajadores mineros realizaron una marcha por Paseo de la Reforma y una protesta en la columna del Angel de la Independencia, para conmemorar el IX aniversario de la explosión Pasta de Conchos, Coahuila, y demandar el rescate de los restos de 63 (de los 65) mineros fallecidos el 19 de febrero de 2006, en el municipio de San Juan de Sabinas, Coahuila.
Hasta las 8 de la noche permanecieron los féretros en el Angel, en memoria de los caídos y de todos los muertos de las minas de México y el mundo.
los feretros
Dos trabajadores con playera roja, cargaron los féretros con una cruz blanca en la superficie, los minero critican "la irresponsabilidad, corrupción e impunidad de empresarios y autoridades", pues señalan que esto continúa generando accidentes en las minas.
demandan reabrir la investigacion
La marcha caminó desde las oficinas de Grupo México hasta el Angel de la Independencia. Ahí, desfilaron desde Campos Elíseos, tres viudas de los mineros, quienes dijeron que es difícil seguir adelante, pues aún lloran a sus esposos.
En una entrevista, las viudas afirmaron que tienen que trabajar para llevar sustento a sus familias e incluso algunas tuvieron que pedir permiso para trasladarse de Coahuila a la ciudad de México.
Exigieron reabrir la investigación "de las verdaderas causas que originaron ese homicidio industrial, para que se pueda castigar con todo el rigor de la ley a los empresarios de Grupo México y su filial en Pasta de Conchos.
"Esto, por la negligencia criminal mostrada en esa ocasión, que se ha seguido dando en otras instalaciones mineras de esa misma empresa, donde igualmente no se ha castigado como se debe a los empresarios responsables de dichas tragedias".
Asimismo, esperan que el caso sea admitido próximamente por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
En el aniversario participaron familiares, así como distintas organizaciones sociales, agrupaciones sindicales, eclesiásticos, grupos políticos y sociales.
justo a las 2:10 de la mañana...
Desde la madrugada del miércoles comenzaron a desarrollarse foros en un campamento permanente ubicado en el entronque de acceso a la mina, justo a las 2:10 de la mañana, hora en que se suscitó la tragedia hace nueve años.
Por la mañana hubo una misa en memoria de los mineros fallecidos en las puertas de acceso a la empresa, entonces propiedad de Grupo Industrial Minera México, donde acudieron viudas, hijos y nietos, con flores en mano
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