Raúl Macías, Foto: Luis A. Barrera
Tremendo trancazo se dio un trabajador de la construcción, al caer de una altura de aproximadamente 10 pisos, porque cuando realizaba reparaciones en el interior de una nueva tienda de la empresa del logo de la llave amarilla y letras azules, pisó un falso plafón y terminó quedando en una cornisa, la cual por fortuna le salvó la vida y solamente quedó con lesiones leves.
De acuerdo con compañeros de trabajo, el joven lesionado se encontraba pintando unos muros, pero en un descuido se hizo para atrás y sus pies se hundieron en el falso plafón, cayendo desde una altura considerable. Relataron que al percatarse dieron aviso a los encargados de la tienda y salieron corriendo a la calle, temiendo lo peor, pero para fortuna del joven quedó en la cornisa.
Esta tienda que se localiza en el cruce de Lázaro Cárdenas y Salto del Agua, fue acordonada para que los transeúntes no interfirieran en las labores de rescate de los paramédicos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) y de la Cruz Roja, que coordinados comenzaron a planear la forma en cómo bajar al lesionado sin que se le pusiera en riesgo.
Se acordó que primero en el lugar donde se encontraba el lesionado, se le iba a inmovilizar el cuello y evitar una fractura en la columna; así se procedió y luego se le colocó cuidadosamente en una camilla rígida del ERUM, buscando que el cuerpo del joven estuviera perfectamente asegurado antes de que se hiciera la labor para descenderlo de la cornisa y trasladarlo a la Cruz Roja de Polanco
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