Raúl Macías
Las carreteras que comunican al Estado de México con el Distrito Federal se veían tranquilas, coches y camiones circulaban sin contratiempos, pero tras emitirse la alerta por la fuga de Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, alias "El Chapo", todo se convirtió en un caos; camionetas artilladas del Ejército Mexicano, de la Policía Federal y patrullas de la entidad mexiquense se apostaron en las casetas y entronques en busca del sinaloense.
Se reveló que fueron cerca de 1,000 los servidores públicos de las corporaciones policiacas a quienes se les comisionó dar con el paradero de "El Chapo", algunos de ellos se introdujeron a la regadera donde se le vio por última vez a Guzmán Loera. Caminaron el kilómetro y medio que momentos antes recorriera el líder del Cártel de Sinaloa hasta llegar a una vivienda en construcción en la Colonia Santa Juanita
Al localizar la vivienda en construcción, que consta de tres recámaras, cocina y sala comedor, los policías federales y castrenses revisaron ese espacio y las parcelas que estaban cerca del terreno en busca del narcotraficante. El operativo se extendió a las calles de esa colonia que eran fuertemente custodiadas y buscaban el más mínimo indicio que pudiera revelar si se encontraba en una casa del lugar.
Fueron pasando los minutos, los moradores de Santa Juanita se espantaron al ver la fuerte movilización policiaca. Desconocían el motivo de los policías y soldados. Algunos tuvieron a bien encender sus televisores y enterarse que del penal El Altiplano (antes Almoloya), al filo de las 20:52 horas, el peligroso narcotraficante Joaquín Guzmán había logrado darse a la fuga.
Tramo a tramo fue recorrida la casa en donde inicia el túnel de 1.5 kilómetros que conecta con el penal de máxima seguridad, concretamente, en la regadera de la celda en donde se encontraba "El Chapo". Observaron la zona de terracería en busca de huellas de neumáticos y así poder determinar si quienes lo ayudaron a escapar lo sacaron de ahí en auto, motocicleta o a pie.
Sin embargo, no se reveló si es que encontraron alguna huella, sobre todo, porque con las unidades de la Policía Federal y del Ejército pudieron haber sido borradas, por lo que se procedió también a continuar la búsqueda en la autopista que conecta al Estado de México con el Distrito Federal y otros municipios de la entidad mexiquense, y así evitar lograr evadir la acción de la justicia.
Vehículos en los que viajaban familias completas, personas solas o acompañadas, así como camiones del transporte público y de carga fueron revisados minuciosamente cerca de la caseta de entrada a la capital del país. Aunado a esta acción, se dio la orden de que los vuelos públicos y privados en la terminal aérea de Toluca fueran suspendidos hasta que se revisara el terreno del aeropuerto.
Fueron pasando las horas y la búsqueda no arrojaba buenos resultados; cajuelas y maleteros de camiones y autos particulares no dejaban de ser inspeccionados, pero nada, no se encontraba oculto nadie. Pero las autoridades no bajarán la guardia hasta poder ubicar a Joaquín Archivaldo, quien les llevaba algo de tiempo de ventaja, lo que le permitió "poner pies en polvorosa".
Cabe destacar que elementos de la policía capitalina también cuentan ya con fotografías de "El Chapo" Guzmán y se abocarán a la captura del líder del Cártel de Sinaloa, el cual será buscado en algunos predios conocidos como propiedades de integrantes del grupo delictivo del sinaloense, "barón de la droga", que se vuelve a ubicar como uno de los hombres más buscados en el mundo, como lo hiciera en su tiempo cuando entre él y Osama Bin Laden no había mucha diferencia en la escala de búsqueda.
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