Patricia Carrasco
La exhortación apostólica del Papa Francisco dada a conocer ayer, donde pide madurar los noviazgos y rechaza el llamado "sexo seguro" que se promueve en la actualidad, además otro de los temas más tocados en "Amoris Laetitia" es el de los divorciados vueltos a casar, homosexuales y teoría de género.
Sobre la comunión de los divorciados vueltos a casar, el documento da la garantía de que la Iglesia se preocupa por ellos y por su situación concreta; quiere que sepan y sientan que son parte de la Iglesia y que no están excomulgados.
Aunque todavía no puedan participar plenamente en la vida sacramental de la Iglesia, les anima a tomar parte activa en la vida de la comunidad.
En cuanto al tema de los homosexuales, señala: "deseamos ante todo reiterar que toda persona, independientemente de su tendencia sexual, ha de ser respetada en su dignidad y acogida con respeto, procurando evitar todo signo de discriminación injusta y particularmente cualquier forma de agresión y violencia. Por lo que se refiere a las familias, se trata de asegurar un respetuoso acompañamiento, con el fin de que aquellos que manifiestan una tendencia homosexual puedan contar con la ayuda necesaria para comprender y realizar plenamente la voluntad de Dios".
La publicación se dio a conocer en italiano, francés, inglés, alemán, español y portugués. En esta exhortación apostólica, el Santo Padre reflexiona sobre las consideraciones vertidas sobre el tema de la familia por 250 obispos de todo el mundo en octubre del año pasado en el Vaticano, durante el Sínodo de Obispos sobre la Familia, llevado a cabo bajo el lema "La vocación y misión de la familia en la Iglesia y en el mundo moderno", comentó el Sistema Informativo de la Arquidiócesis Primada de México.
Aunque durante el sínodo se debatieron diversos temas relacionados con la familia, los medios de comunicación concentraron su atención en dos cuestiones en particular: el acceso a la comunión por parte de los divorciados en nueva unión y la atención pastoral a los homosexuales.
Precisó que en la presentación de este documento participaron el cardenal Lorenzo Baldisseri, secretario general del Sínodo de los Obispos; el cardenal Christoph Schönborn, arzobispo de Viena, y el matrimonio formado por Francesco Miano y Giuseppina De Simona in Miano, profesores universitarios especialistas en el tema de la familia. Un concepto clave de Amoris Leatitia es la integración. Los pastores tienen que hacer todo lo posible para ayudar a las personas en estas situaciones a involucrarse en la vida de la comunidad.
El Siame destaca que dicho documento recoge también la enseñanza de la Iglesia en el sentido de que el matrimonio es entre un hombre y una mujer, y las uniones homosexuales no se pueden equiparar al matrimonio cristiano. En esta exhortación, integrada por 9 capítulos y 325 numerales, el Pontífice pide madurar los noviazgos, denuncia los errores de la ideología de género y presenta una visión positiva de la vida en familia, con algunas características importantes a partir del cántico de la caridad de San Pablo en la primera carta a los Corintios. Insiste en una adecuada educación sexual y rechaza el llamado "sexo seguro" que mucho se promueve en el mundo actual.
Respecto a la teoría de género, Amoris Laetitia establece que si bien es legítimo y deseable que las mujeres quieran estudiar, trabajar, desarrollar sus capacidades y tener objetivos personales, no se puede ignorar la necesidad que los niños tienen de la presencia materna, especialmente en los primeros meses de vida.
"El debilitamiento de la presencia materna, con sus cualidades femeninas, es un riesgo grave para nuestra tierra. Valoro el feminismo cuando no pretende la uniformidad ni la negación de la maternidad, porque la grandeza de la mujer implica todos los derechos que emanan de su inalienable dignidad humana, pero también de su genio femenino, indispensable para la sociedad"
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