Álvaro Velázquez
TLALNEPANTLA, Méx.- Después del motín y la fuga de reos que se registró la tarde-noche del pasado 13 de junio y tras el sorpresivo operativo que implementaron esta madrugada dentro del penal de Barrientos más de 500 elementos de la CESC y del Ejercito Mexicano, donde sorpresivamente se encontraron cientos de armas punzocortantes, teléfonos celulares, palos y hasta dinero en efectivo, autoridades estatales decidieron esta mañana, por considerar que al interior se estaban dando claros actos de corrupción, destituir de su cargo y someter a un procedimiento administrativo al director del Centro Penitenciario, José Luis Vega Carmona.
En lugar de dicho servidor público, para asumir el cargo autoridades estatales mexiquenses designaron a Paula Gabriela Valdez Herrera.
La destitución de José Luís Vega Carmona como director del penal de Barrientos era un secreto a voces, pues a raíz del motín que realizaron el pasado 13 de junio más de 500 internos y la fuga de otros 4 quedó mal parado, además de que las denuncias que existían de los preocupantes actos de corrupción que existían al interior del penal eran cada vez más contantes tanto por familiares de los internos como los mismos reclusos, que ya habían manifestado total inconformidad y exigían una solución a dicho problema que era fomentado por los mismos custodios y autoridades del penal.
Para solucionar todas esas irregularidades, que existen dentro de ese penal, más de 500 elementos de la CESC, del Ejército Mexicano y los mismos custodios implementaron un sorpresivo operativo dentro del penal de Barrientos para detectar y decomisar droga, armas de fuego y punzocortantes y todo aquel instrumento que pudieran servir para atacar alguien u organizar un nuevo motín, e incluso que se dieran enfrentamientos entre la misma población por su control.
Durante el operativo los guardianes del orden encontraron almacenadas gran cantidad de armas consistentes en 155 pedazos de metal en forma de punta, 97 picahielos, 2 navajas, 4 cuchillos, 22 martillos, 53 tijeras, 35 garrotes de madera, 133 palos, dvds, televisores y hasta 32,486 pesos en efectivo que posiblemente eran producto de las "rentas" que supuestamente existen dentro del penal.
TLALNEPANTLA, Méx.- Después del motín y la fuga de reos que se registró la tarde-noche del pasado 13 de junio y tras el sorpresivo operativo que implementaron esta madrugada dentro del penal de Barrientos más de 500 elementos de la CESC y del Ejercito Mexicano, donde sorpresivamente se encontraron cientos de armas punzocortantes, teléfonos celulares, palos y hasta dinero en efectivo, autoridades estatales decidieron esta mañana, por considerar que al interior se estaban dando claros actos de corrupción, destituir de su cargo y someter a un procedimiento administrativo al director del Centro Penitenciario, José Luis Vega Carmona.
En lugar de dicho servidor público, para asumir el cargo autoridades estatales mexiquenses designaron a Paula Gabriela Valdez Herrera.
La destitución de José Luís Vega Carmona como director del penal de Barrientos era un secreto a voces, pues a raíz del motín que realizaron el pasado 13 de junio más de 500 internos y la fuga de otros 4 quedó mal parado, además de que las denuncias que existían de los preocupantes actos de corrupción que existían al interior del penal eran cada vez más contantes tanto por familiares de los internos como los mismos reclusos, que ya habían manifestado total inconformidad y exigían una solución a dicho problema que era fomentado por los mismos custodios y autoridades del penal.
Para solucionar todas esas irregularidades, que existen dentro de ese penal, más de 500 elementos de la CESC, del Ejército Mexicano y los mismos custodios implementaron un sorpresivo operativo dentro del penal de Barrientos para detectar y decomisar droga, armas de fuego y punzocortantes y todo aquel instrumento que pudieran servir para atacar alguien u organizar un nuevo motín, e incluso que se dieran enfrentamientos entre la misma población por su control.
Durante el operativo los guardianes del orden encontraron almacenadas gran cantidad de armas consistentes en 155 pedazos de metal en forma de punta, 97 picahielos, 2 navajas, 4 cuchillos, 22 martillos, 53 tijeras, 35 garrotes de madera, 133 palos, dvds, televisores y hasta 32,486 pesos en efectivo que posiblemente eran producto de las "rentas" que supuestamente existen dentro del penal.
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