Por: Raúl Macías, LA PRENSA
Caos vehicular, miles de personas afectadas y un policía herido fue lo que dejó a su paso la manifestación que ayer llevaron a cabo integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), de varios estados de la República, quienes exigían a las autoridades federales que sean tomados en cuenta y no se les siga manteniendo marginados y sin apoyo cuando se les necesita.
Desde temprana hora de ayer la zona centro del Distrito Federal se convirtió en un enorme estacionamiento. Los automovilistas no tenían para dónde moverse y el ruido de los claxon era ensordecedor. Los elementos de Tránsito de la SSP-DF eran insuficientes para dar una solución, y esto era aprovechado por los manifestantes que se apoderaron de importantes vialidades.
La marcha partió del Monumento a la Revolución. Los campesinos iban con la consigna de llegar a la Secretaría de Gobernación, pero solamente llegaron a unos pasos de donde se localiza el Reloj Chino. En ese punto ya les fue imposible pasar porque estaban colocadas varias vallas. Esto por un momento puso tenso el ambiente, porque se dieron los primeros roces entre policías federales y manifestantes.
Con gritos de "tierra y libertad", que en su tiempo le dieran valor al líder zapatista, los cerca de 4,500 manifestantes pedían que se les tomara en cuenta en todas las decisiones del gobierno federal, y que se salve al campo de la crisis por la que atraviesa ante la escasez de agua, lo que ha acabado con los cultivos en miles de hectáreas en todo el país.
Como gran parte de Reforma, Juárez, Plaza de la República, Hidalgo, Guerrero y Rosales se encontraban cerradas al paso vehicular, los automovilistas se comenzaron a desesperar y optaban por circular en contraflujo o sentido contrario agravando más el tráfico en la zona. Incluso la Línea 4 del Metrobús tuvo que buscar otras calles por las cuales cruzar y no dejar de brindar el servicio.
Ya pasado el mediodía, cuando los manifestantes se encontraban en las afueras de la Secretaría de Gobernación (Segob), un automovilista entró en desesperación y con prepotencia golpeó dos patrullas y atropelló a un elemento de Tránsito, por lo que fue detenido y presentado ante las autoridades correspondientes por el delito de lesiones por accidente vial.
Desde temprana hora de ayer la zona centro del Distrito Federal se convirtió en un enorme estacionamiento. Los automovilistas no tenían para dónde moverse y el ruido de los claxon era ensordecedor. Los elementos de Tránsito de la SSP-DF eran insuficientes para dar una solución, y esto era aprovechado por los manifestantes que se apoderaron de importantes vialidades.
La marcha partió del Monumento a la Revolución. Los campesinos iban con la consigna de llegar a la Secretaría de Gobernación, pero solamente llegaron a unos pasos de donde se localiza el Reloj Chino. En ese punto ya les fue imposible pasar porque estaban colocadas varias vallas. Esto por un momento puso tenso el ambiente, porque se dieron los primeros roces entre policías federales y manifestantes.
Ya pasado el mediodía, cuando los manifestantes se encontraban en las afueras de la Secretaría de Gobernación (Segob), un automovilista entró en desesperación y con prepotencia golpeó dos patrullas y atropelló a un elemento de Tránsito, por lo que fue detenido y presentado ante las autoridades correspondientes por el delito de lesiones por accidente vial.
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