Más que la desaparición de poderes en Michoacán, legisladores
cuestionan el impaz del gobierno federal en el combate a la
delincuencia organizada en ésta y en diversa entidades donde la
violencia y la inseguridad siguen afectando a los ciudadanos y
empresas. Tampoco ven que la militarización sea la solución, proponen
un "gran acuerdo" porque el problema de fondo es la pobreza y
desarrollo económico y estado de derecho.
En el marco de la segunda sesión de la Comisión Permanente en el
Senado, el diputado Ricardo Moneral comentó que es una tristeza que
el crimen se haya apoderado de los principales rincones de Michoacán,
"y ahí no hay ley y no hay autoridad.
Pero más que desaparición de poderes, como piden senadores del PAN,
opinó que debería establecerse una coordinación con la instancia
estatal, porque "me temo que hay un abandono premeditado en Michoacán,
en las regiones más difíciles en materia de seguridad, es Michoacán,
Guerrero, Sinaloa y Zacatecas, de la instancia federal y hay una falta
de coordinación entre las policías y los órganos de procuración de
justicia y de persecución del delito".
Es muy grave lo que está pasando en Michoacán, pero también en todo el
país, la inseguridad va en aumento, las ejecuciones van en aumento y
solo han bajado de la nota principal los asesinatos y las masacres.
México está viviendo una etapa difícil, es un océano de violencia el
que se está viviendo en nuestro país y nosotros, insistió.
Dijo que el subsecretario de Seguridad, Manuel Mondragón habla mucho
pero no hace nada, "es muy protagónico, yo no le veo ninguna eficacia,
habla y habla y habla pero no veo ningún resultado positivo, no le
creo a Mondragón". Agregó, que no se ve nada sobre la gendarmería; en
fin, la estrategia, no cambiado, añidió.
El coordinador de diputados del PRD, Silvano Aureoles, comentó que lo
que necesita Michoacán en este momento, más que meterle todavía un
ingrediente adicional, con la desaparición de poderes o convocar a
nuevas elecciones, sino un gran acuerdo para que haya un gobierno que
tenga plenas facultades, toma de decisiones y reencauzar la
problemática que hoy vive el estado.
Lo que se requiere, enfatizó, es un gran acuerdo entre las fuerzas
políticas, no solamente locales sino federal y la intervención
inmediata del gobierno de la República, no para sustituir ni al
Congreso local, ni al Ejecutivo del estado, sino para coadyuvar, y
esencialmente en el tema de las inversiones y el desarrollo económico
del estado.
Sugirió que la Federación tiene que empezar con una responsabilidad
que no ha hecho, se haga cargo de la parte que le toca invertir y
crear desarrollo económico y social, así como empleos.
Al mismo tiempo, que se empiece a restablecer el estado de derecho,
porque "prácticamente en todo el estado está perdido".
"Llevamos más de 25 años que en Michoacán no hay inversión federal,
no hay desarrollo de obras; los 220 kilómetros de costas están
abandonados, el puerto más importante del Pacífico con atención muy
limitada y muchos más ejemplos que podría citar", se quejó.
Ya se comprobó con Felipe Calderón, apuntó, con la militarización no
se va a solucionar la inseguridad, fracaso en Michoacán y en todo el
país, y son mucho estados que se encuentran en una situación crítica,
coincidió. "No, al contrario, no va a ser la solución ni con soldados
ni con policías, porque es un problema de carácter social, lo que se
ha roto ante un abandono de muchos años y pues en los últimos meses
prácticamente al no existir gobierno.
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