CIUDAD DEL VATICANO (OEM-Notimex y EFE).- Un grupo de mexicanos entonó hoy espontáneamente "Las Mañanitas" a Francisco en la Plaza de San Pedro, un día después de su cumpleaños número 77.
Durante la audiencia general de los miércoles, en la cual participaronmás de 26,000 personas, los fieles dedicaron no sólo las tradicionales porras y vivas al Pontífice, también se acordaron de su onomástico. Incluso en inglés le cantaron el "happy birthday".
Antes de la catequesis el líder católico recorrió la plaza vaticana a bordo del papamóvil descubierto y al pasar frente a un numeroso grupo de Legionarios de Cristo se paró y bajó, porque uno de los sacerdotes le ofreció el tradicional mate argentino.
De hecho fueron 1,450 entre sacerdotes, seminaristas y familiares ligados a la Legión que estuvieron en la plancha asfáltica, luego que el sábado pasado fueron ordenados en Roma 31 nuevos sacerdotes de esa congregación de origen mexicano.
En su reflexión semanal Jorge Mario Bergoglio aseguró que el cristiano que "se pavonea" no sirve a los demás, sobre todo a quienes más lo necesitan en las fiestas navideñas, en realidad no es cristiano, sino que es un pagano.
Durante la última audiencia general del año, en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Sumo Pontífice habló sobre la Navidad asegurando que "el nacimiento de Jesús es expresión de la confianza de Dios en el hombre y fundamento de la esperanza del hombre en Dios".
"El verbo no se ha encarnado en un mundo ideal, sino que ha querido compartir nuestras alegrías y sufrimientos, y demostrarnos así que Dios se ha puesto de parte de los hombres, con su amor real y concreto", dijo.
Recordó que en la natividad Dios se "abaja", se hace pequeño y pobre. Por eso si se quiere ser como él es necesario ser solidarios, especialmente con los más débiles.
"Que en esta Navidad el amor, la bondad y la generosidad entre todos sean un reflejo y una prolongación de la luz de Jesús", deseó.
"En Navidad, Dios se manifiesta no como alguien que está en lo alto y domina el Universo, sino que se agacha, baja a la Tierra, humilde y pobre. Para ser iguales que él no tenemos que ponernos por encima de los demás, sino agacharnos, ponernos al servicio, hacernos pequeños con los pequeños y pobres con los pobres", dijo Francisco.
"Es una cosa fea cuando se ve a un cristiano que no quiere agacharse, que no quiere servir. Un cristiano que se pavonea es feo. Ese no es cristiano, es pagano. El cristiano sirve y se agacha", añadió.
El Papa, quien antes de pronunciar su catequesis hizo el habitual recorrido entre los fieles a bordo del jeep y bebió mate que le ofreció uno de los presentes, hizo de la Navidad el hilo argumental de su discurso.
"La Navidad es una fiesta de confianza y esperanza, que supera la incertidumbre y el pesimismo. Y la razón de nuestra esperanza es ésta: que Dios está con nosotros y Dios se fía aún de nosotros", incidió.
Ya en castellano, Francisco, para quien tocaron unos mariachis presentes en la plaza, quiso saludar a los peregrinos de lengua española presentes en una soleada pero fría mañana en San Pedro, en particular a los llegados desde España, México, Argentina y otros países latinoamericanos.
Y dedicó también un especial saludo a la delegación del equipo de futbol del que es seguidor, el San Lorenzo, que viajó hasta el Vaticano para ofrecerle el trofeo del Torneo Inicial argentino que acaba de ganar.
El ofrecimiento tendrá lugar precisamente tras la audiencia general y será realizada por una delegación del club argentino, encabezada por su presidente, Matías Lammens, según ha informado la embajada de Argentina ante la Santa Sede.
Antes de la catequesis el líder católico recorrió la plaza vaticana a bordo del papamóvil descubierto y al pasar frente a un numeroso grupo de Legionarios de Cristo se paró y bajó, porque uno de los sacerdotes le ofreció el tradicional mate argentino.
De hecho fueron 1,450 entre sacerdotes, seminaristas y familiares ligados a la Legión que estuvieron en la plancha asfáltica, luego que el sábado pasado fueron ordenados en Roma 31 nuevos sacerdotes de esa congregación de origen mexicano.
En su reflexión semanal Jorge Mario Bergoglio aseguró que el cristiano que "se pavonea" no sirve a los demás, sobre todo a quienes más lo necesitan en las fiestas navideñas, en realidad no es cristiano, sino que es un pagano.
Durante la última audiencia general del año, en la Plaza de San Pedro del Vaticano, el Sumo Pontífice habló sobre la Navidad asegurando que "el nacimiento de Jesús es expresión de la confianza de Dios en el hombre y fundamento de la esperanza del hombre en Dios".
Recordó que en la natividad Dios se "abaja", se hace pequeño y pobre. Por eso si se quiere ser como él es necesario ser solidarios, especialmente con los más débiles.
"En Navidad, Dios se manifiesta no como alguien que está en lo alto y domina el Universo, sino que se agacha, baja a la Tierra, humilde y pobre. Para ser iguales que él no tenemos que ponernos por encima de los demás, sino agacharnos, ponernos al servicio, hacernos pequeños con los pequeños y pobres con los pobres", dijo Francisco.
"Es una cosa fea cuando se ve a un cristiano que no quiere agacharse, que no quiere servir. Un cristiano que se pavonea es feo. Ese no es cristiano, es pagano. El cristiano sirve y se agacha", añadió.
El Papa, quien antes de pronunciar su catequesis hizo el habitual recorrido entre los fieles a bordo del jeep y bebió mate que le ofreció uno de los presentes, hizo de la Navidad el hilo argumental de su discurso.
"La Navidad es una fiesta de confianza y esperanza, que supera la incertidumbre y el pesimismo. Y la razón de nuestra esperanza es ésta: que Dios está con nosotros y Dios se fía aún de nosotros", incidió.
Ya en castellano, Francisco, para quien tocaron unos mariachis presentes en la plaza, quiso saludar a los peregrinos de lengua española presentes en una soleada pero fría mañana en San Pedro, en particular a los llegados desde España, México, Argentina y otros países latinoamericanos.
Y dedicó también un especial saludo a la delegación del equipo de futbol del que es seguidor, el San Lorenzo, que viajó hasta el Vaticano para ofrecerle el trofeo del Torneo Inicial argentino que acaba de ganar.
El ofrecimiento tendrá lugar precisamente tras la audiencia general y será realizada por una delegación del club argentino, encabezada por su presidente, Matías Lammens, según ha informado la embajada de Argentina ante la Santa Sede.
Enviado desde mi iPad
Publicar un comentario