Raúl Macías
Minutos de angustia se vivieron la noche de ayer en la estación del Metro Hidalgo, esto porque en los torniquetes que dan a la salida sobre Avenida Hidalgo, elementos de seguridad del Sistema de Transporte Colectivo Metro y los del movimiento #PosMeSalto se liaron a golpes porque los uniformados les exigieron que se salieran y que no permitirían que dejaran entrara nadie gratis a la "limosina naranja".
Esto comenzó a calentar los ánimos y fue cuando se dieron los primeros empujones, pero con el miedo reflejado en el rostro los policías que se encargan de la "seguridad" de los usuarios, porque usuarios comenzaron a apoyar a los jóvenes, raudos y veloces solicitaron la presencia de elementos del cuerpo de granaderos, quienes llegaron y calentaron más los el ambiente.
Con puntapiés dados de manera discreta para no ser grabados por quienes lo hacían con sus celulares, los policías comenzaron a imponerse, pero la juventud se vio rebasada y al estar forcejeando se fueron encima de los torniquetes, mismos que quedaron destrozados, y fue entonces que se comenzaron a echar la culpa, quienes la libraron de ser detenidos, dijeron que fueron los uniformados quienes dañaron las instalaciones y los polis que los manifestantes.
Para que se castigara a quienes presuntamente dañaron los torniquetes, y evitar que intentaran huir, los uniformados comenzaron a sacar a varios jóvenes que habían asegurado desde minutos antes; y en medio de rechiflas y recordatorios maternos, los guardianes del orden los subieron a las patrullas que estacionaron sobre la Avenida Hidalgo, en donde ya se encontraba arremolinada varia gente que busco impedir que se llevaran a los manifestantes.
En las camionetas varios elementos policiacos azotaron la cabeza de los detenidos contra la caja de las pick up, lo que enardeció más a las personas, sobre todo a vagoneros que exigían que bajaran a sus compañeros, porque ellos no tuvieron nada que ver con el pleito que se dio entre Granaderos de la SSPDF y presuntos integrantes del movimiento #PosMeSalto.
Controlada la gresca, los detenidos fueron trasladados a la agencia del ministerio público de la Delegación Cuauhtémoc, hasta donde acudieron varios vagoneros para ver la situación jurídica de sus amigos, y dijeron que de entrada se les informó que se encuentran bajo el cargo de ultraje a la autoridad y lo que resulte, negando también rotundamente que ellos hayan causado los destrozos en las instalaciones del Metro Hidalgo.
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Minutos de angustia se vivieron la noche de ayer en la estación del Metro Hidalgo, esto porque en los torniquetes que dan a la salida sobre Avenida Hidalgo, elementos de seguridad del Sistema de Transporte Colectivo Metro y los del movimiento #PosMeSalto se liaron a golpes porque los uniformados les exigieron que se salieran y que no permitirían que dejaran entrara nadie gratis a la "limosina naranja".
Esto comenzó a calentar los ánimos y fue cuando se dieron los primeros empujones, pero con el miedo reflejado en el rostro los policías que se encargan de la "seguridad" de los usuarios, porque usuarios comenzaron a apoyar a los jóvenes, raudos y veloces solicitaron la presencia de elementos del cuerpo de granaderos, quienes llegaron y calentaron más los el ambiente.
Con puntapiés dados de manera discreta para no ser grabados por quienes lo hacían con sus celulares, los policías comenzaron a imponerse, pero la juventud se vio rebasada y al estar forcejeando se fueron encima de los torniquetes, mismos que quedaron destrozados, y fue entonces que se comenzaron a echar la culpa, quienes la libraron de ser detenidos, dijeron que fueron los uniformados quienes dañaron las instalaciones y los polis que los manifestantes.
Para que se castigara a quienes presuntamente dañaron los torniquetes, y evitar que intentaran huir, los uniformados comenzaron a sacar a varios jóvenes que habían asegurado desde minutos antes; y en medio de rechiflas y recordatorios maternos, los guardianes del orden los subieron a las patrullas que estacionaron sobre la Avenida Hidalgo, en donde ya se encontraba arremolinada varia gente que busco impedir que se llevaran a los manifestantes.
En las camionetas varios elementos policiacos azotaron la cabeza de los detenidos contra la caja de las pick up, lo que enardeció más a las personas, sobre todo a vagoneros que exigían que bajaran a sus compañeros, porque ellos no tuvieron nada que ver con el pleito que se dio entre Granaderos de la SSPDF y presuntos integrantes del movimiento #PosMeSalto.
Controlada la gresca, los detenidos fueron trasladados a la agencia del ministerio público de la Delegación Cuauhtémoc, hasta donde acudieron varios vagoneros para ver la situación jurídica de sus amigos, y dijeron que de entrada se les informó que se encuentran bajo el cargo de ultraje a la autoridad y lo que resulte, negando también rotundamente que ellos hayan causado los destrozos en las instalaciones del Metro Hidalgo.
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