* Estruendo alertó a policías y al verse rodeado, amenazó que haría explotar bomba de tiempo, misma que resultó ser falsa; al final cayó
Alvaro Velázquez
TLALNEPANTLA, Méx.- Momentos de terror e histeria vivieron clientes y empleados de un banco, en este municipio, al ser sorprendidos esta mañana por solitario delincuente que tras mostrarle al gerente un recado escrito en una hoja de papel donde le exigía 10 millones de pesos, hizo estallar dentro de las instalaciones dos petardos y luego amenazó con hacer explotar otros 6 que llevaba enredados en su cinturón y una bomba si el citado gerente no cumplía con sus exigencias.
Sin embargo, cuando el presunto ladrón que fue identificado como Darío Suárez Broca, de 38 años de edad, vecino del municipio de Tultitlán, estaba a punto de lograr su objetivo, policías municipales que patrullaban la zona, al escuchar las dos primeras detonaciones de los petardos y los gritos de la gente, rápidamente entraron al banco y en coordinación con los elementos de la SSC que custodiaban las instalaciones capturaron al intrépido delincuente.
Cabe destacar que dicho sujeto todavía en su afán por no ser detenido mostró a los uniformados una caja que llevaba escondida en una mochila, donde presuntamente tenía una bomba con un reloj que amenazaba con hacer explotar, lo que finalmente no sucedió, pues el supuesto artefacto explosivo era falso.
El frustrado asalto que originó una impresionante movilización policiaca y que fue calificado como insólito, pues nunca antes se había registrado un hecho semejante en este municipio, se registró minutos antes del mediodía de hoy, dentro de una de las sucursales del Bancomer, ubicadas en la esquina de la Avenida Gustavo Baz y la calle Lázaro Cárdenas, en la Colonia Tequesquináhuac, en este municipio.
El gerente de la institución crediticia, dijo a la policía que las actividades dentro del banco se llevaban con toda normalidad y que en el interior se encontraban por lo menos 20 clientes realizando diferentes trámites, cuando repentinamente entró solitario delincuente que pidió entrevistarse con él.
Una vez que tuvo a dicho sujeto dentro de sus oficinas, dijo el gerente, le mostró una hoja de papel con un mensaje donde le manifestaba que era integrante de una organización delictiva y le exigía que le entregara 10 millones de pesos o de lo contrario haría explotar una bomba que llevaba escondida dentro de una mochila.
Sin embargo, explicó el gerente, como le manifestó al delincuente que en ese momento no contaba con tal cantidad de dinero y que tenía que esperar a que realizara algunos movimientos, se enfureció y a manera de amenaza hizo explotar dentro de las instalaciones dos petardos, lo que ocasionó que clientes y empleados vivieran momentos de terror e histeria.
Luego de ello, agregó, el delincuente para demostrarle que no estaba jugando, se levanto su sudadera y le mostró que tenía enredado en su cinturón otros 6 petardos que haría explotar junto con una bomba que llevaba en su misma mochila y con palabras altisonantes le ordenó que le entregara los 10 millones de pesos.
Ante la delicada situación que se estaba viviendo dentro del banco y consciente de que el presunto ladrón no estaba jugando, pues ya había hecho explotar dos petardos, añadió el gerente, se dio a la tarea de juntar el dinero que exigía el malviviente.
Pero afortunadamente por los gritos de los clientes y empleados y por la explosión de los dos petardos, los policías estatales que custodiaban el banco se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo y casi enseguida como si se tratara de una auténtica película de acción, en coordinación con elementos de la Policía Municipal de Tlalnepantla entraron a las instalaciones para detener al presunto ladrón, pese a que como ya se dijo amenazaba con hacer explotar una supuesta bomba que llevaba en su mochila.
Luego de ello en medio de un impresionante dispositivo de seguridad, elementos de la Policía Municipal trasladaron al detenido a las instalaciones de la PGR en el municipio de Tlalnepantla, donde quedó a disposición del MP federal junto con los 6 petardos que llevaba envueltos en su cinturón y la supuesta bomba que escondía en su mochila.
Alvaro Velázquez
TLALNEPANTLA, Méx.- Momentos de terror e histeria vivieron clientes y empleados de un banco, en este municipio, al ser sorprendidos esta mañana por solitario delincuente que tras mostrarle al gerente un recado escrito en una hoja de papel donde le exigía 10 millones de pesos, hizo estallar dentro de las instalaciones dos petardos y luego amenazó con hacer explotar otros 6 que llevaba enredados en su cinturón y una bomba si el citado gerente no cumplía con sus exigencias.
Sin embargo, cuando el presunto ladrón que fue identificado como Darío Suárez Broca, de 38 años de edad, vecino del municipio de Tultitlán, estaba a punto de lograr su objetivo, policías municipales que patrullaban la zona, al escuchar las dos primeras detonaciones de los petardos y los gritos de la gente, rápidamente entraron al banco y en coordinación con los elementos de la SSC que custodiaban las instalaciones capturaron al intrépido delincuente.
Cabe destacar que dicho sujeto todavía en su afán por no ser detenido mostró a los uniformados una caja que llevaba escondida en una mochila, donde presuntamente tenía una bomba con un reloj que amenazaba con hacer explotar, lo que finalmente no sucedió, pues el supuesto artefacto explosivo era falso.
El frustrado asalto que originó una impresionante movilización policiaca y que fue calificado como insólito, pues nunca antes se había registrado un hecho semejante en este municipio, se registró minutos antes del mediodía de hoy, dentro de una de las sucursales del Bancomer, ubicadas en la esquina de la Avenida Gustavo Baz y la calle Lázaro Cárdenas, en la Colonia Tequesquináhuac, en este municipio.
El gerente de la institución crediticia, dijo a la policía que las actividades dentro del banco se llevaban con toda normalidad y que en el interior se encontraban por lo menos 20 clientes realizando diferentes trámites, cuando repentinamente entró solitario delincuente que pidió entrevistarse con él.
Una vez que tuvo a dicho sujeto dentro de sus oficinas, dijo el gerente, le mostró una hoja de papel con un mensaje donde le manifestaba que era integrante de una organización delictiva y le exigía que le entregara 10 millones de pesos o de lo contrario haría explotar una bomba que llevaba escondida dentro de una mochila.
Sin embargo, explicó el gerente, como le manifestó al delincuente que en ese momento no contaba con tal cantidad de dinero y que tenía que esperar a que realizara algunos movimientos, se enfureció y a manera de amenaza hizo explotar dentro de las instalaciones dos petardos, lo que ocasionó que clientes y empleados vivieran momentos de terror e histeria.
Luego de ello, agregó, el delincuente para demostrarle que no estaba jugando, se levanto su sudadera y le mostró que tenía enredado en su cinturón otros 6 petardos que haría explotar junto con una bomba que llevaba en su misma mochila y con palabras altisonantes le ordenó que le entregara los 10 millones de pesos.
Ante la delicada situación que se estaba viviendo dentro del banco y consciente de que el presunto ladrón no estaba jugando, pues ya había hecho explotar dos petardos, añadió el gerente, se dio a la tarea de juntar el dinero que exigía el malviviente.
Pero afortunadamente por los gritos de los clientes y empleados y por la explosión de los dos petardos, los policías estatales que custodiaban el banco se dieron cuenta de lo que estaba sucediendo y casi enseguida como si se tratara de una auténtica película de acción, en coordinación con elementos de la Policía Municipal de Tlalnepantla entraron a las instalaciones para detener al presunto ladrón, pese a que como ya se dijo amenazaba con hacer explotar una supuesta bomba que llevaba en su mochila.
Luego de ello en medio de un impresionante dispositivo de seguridad, elementos de la Policía Municipal trasladaron al detenido a las instalaciones de la PGR en el municipio de Tlalnepantla, donde quedó a disposición del MP federal junto con los 6 petardos que llevaba envueltos en su cinturón y la supuesta bomba que escondía en su mochila.
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