Arturo R. Pansza
El pleno de la Cámara de Diputados, sin cambio alguno, aprobó tanto en lo general como particular el cuarto dictamen de la minuta del Senado de las leyes secundarias de la reforma energética, por lo que pasa al Ejecutivo Federal para su publicación.
Se trata de las leyes de órganos reguladores, de seguridad industrial y medio ambiente, de las cuales se presentaron diversas reservas, mismas que tras su discusión ninguna prosperó y se avalaron en sus términos.
En la cuarta jornada del periodo extraordinario de sesiones del recinto deliberativo de San Lázaro, luego de la participación de 37 oradores, se emitieron en lo general a favor del documento 333 votos y en contra 125, con lo que se expedirán las leyes de los Organos Reguladores Coordinados en Materia Energética y de la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, además de reformar y derogar diversas disposiciones de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Se presentaron siete mociones suspensivas por parte de los diputados perredistas Roberto López Suárez, Graciela Saldaña Fraire, Carlos Augusto Morales López y Aleida Alavez Ruiz, así como de José Antonio Hurtado Gallegos y Ricardo Monreal Avila, ambos de Movimiento Ciudadano, y de la petista Lilia Aguilar.
Esos representantes populares coincidieron en la necesidad de que el dictamen fuera devuelto a comisiones para su análisis, al asegurar que incluye temas que ponen en riesgo la integridad de los órganos reguladores y representa un retroceso en materia de medio ambiente.
Fue el presidente de la Comisión de Energía de la Cámara Baja, Marco Antonio Bernal García, quien al fundamentar el documento expuso que se establece un nuevo modelo de desarrollo y seguridad energética y por ello se vuelve indispensable la existencia de órganos reguladores fuertes y autónomos, como los que se propusieron.
Dijo que se plantea una serie de enmiendas que constituyen un cambio de paradigma respecto al aprovechamiento sustentable de los hidrocarburos y el desarrollo del sector eléctrico, con el fin de potenciar el crecimiento económico y la prosperidad de todos los mexicanos.
Abundó que este cambio de paradigma se basa en una sólida rectoría del Estado, sustentada en la función de órganos reguladores autónomos y de alta capacidad profesional.
En el marco de la discusión, representantes populares del Partido del Trabajo colocaron carteles en sus curules con leyendas como "Frack-U" y "No al pago de pasivos", mientras que perredistas colocaron en la parte baja del estrado pancartas con la imagen del expresidente Lázaro Cárdenas del Río.
Resulta que el que fue el cuarto de seis dictámenes previsto sobre las leyes reglamentarias en materia energética que la Cámara de Diputados abordará en el periodo extraordinario de sesiones, recibió el apoyo abierto de las bancadas del PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza, que tuvieron que enfrentar los argumentos en contra de los del PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
El pleno de la Cámara de Diputados, sin cambio alguno, aprobó tanto en lo general como particular el cuarto dictamen de la minuta del Senado de las leyes secundarias de la reforma energética, por lo que pasa al Ejecutivo Federal para su publicación.
Se trata de las leyes de órganos reguladores, de seguridad industrial y medio ambiente, de las cuales se presentaron diversas reservas, mismas que tras su discusión ninguna prosperó y se avalaron en sus términos.
En la cuarta jornada del periodo extraordinario de sesiones del recinto deliberativo de San Lázaro, luego de la participación de 37 oradores, se emitieron en lo general a favor del documento 333 votos y en contra 125, con lo que se expedirán las leyes de los Organos Reguladores Coordinados en Materia Energética y de la Agencia Nacional de Seguridad Industrial y de Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, además de reformar y derogar diversas disposiciones de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.
Se presentaron siete mociones suspensivas por parte de los diputados perredistas Roberto López Suárez, Graciela Saldaña Fraire, Carlos Augusto Morales López y Aleida Alavez Ruiz, así como de José Antonio Hurtado Gallegos y Ricardo Monreal Avila, ambos de Movimiento Ciudadano, y de la petista Lilia Aguilar.
Esos representantes populares coincidieron en la necesidad de que el dictamen fuera devuelto a comisiones para su análisis, al asegurar que incluye temas que ponen en riesgo la integridad de los órganos reguladores y representa un retroceso en materia de medio ambiente.
Fue el presidente de la Comisión de Energía de la Cámara Baja, Marco Antonio Bernal García, quien al fundamentar el documento expuso que se establece un nuevo modelo de desarrollo y seguridad energética y por ello se vuelve indispensable la existencia de órganos reguladores fuertes y autónomos, como los que se propusieron.
Dijo que se plantea una serie de enmiendas que constituyen un cambio de paradigma respecto al aprovechamiento sustentable de los hidrocarburos y el desarrollo del sector eléctrico, con el fin de potenciar el crecimiento económico y la prosperidad de todos los mexicanos.
Abundó que este cambio de paradigma se basa en una sólida rectoría del Estado, sustentada en la función de órganos reguladores autónomos y de alta capacidad profesional.
En el marco de la discusión, representantes populares del Partido del Trabajo colocaron carteles en sus curules con leyendas como "Frack-U" y "No al pago de pasivos", mientras que perredistas colocaron en la parte baja del estrado pancartas con la imagen del expresidente Lázaro Cárdenas del Río.
Resulta que el que fue el cuarto de seis dictámenes previsto sobre las leyes reglamentarias en materia energética que la Cámara de Diputados abordará en el periodo extraordinario de sesiones, recibió el apoyo abierto de las bancadas del PRI, PAN, PVEM y Nueva Alianza, que tuvieron que enfrentar los argumentos en contra de los del PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
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