Los padres ofrecieron ayer en las instalaciones de la Normal de Ayotzinapa, una conferencia de prensa en la que repudiaron la tesis de que los 43 jóvenes fueron quemados juntos, porque existen muchas inconsistencias al respecto y por ello, insistieron en que no permitirán que se dé un carpetazo y se cierre la investigación.
El señor Mario González, padre de César Manuel González, indicó que el gobierno federal ha incumplido en los acuerdos que signó para que un grupo de expertos propuestos por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos participara en la investigación ofreciendo apoyo humano y técnico en el proceso de búsqueda, dado que hasta este momento el grupo de expertos no ha podido ingresar a nuestro país.
En ese tenor urgieron a que se realice una investigación con todo el profesionalismo, "en el proceso de investigación se tiene muchas inconsistencias, por ejemplo el hecho de que los restos de los que se extrajo la pieza por la que se identificó al joven Alexander Mora Venancio, se localizó en el río, y no hay evidencia tangible que lo identifique con el basurero de Cocula, donde la PGR presume que fueron calcinados los 43 jóvenes.
Resaltaron que con la participación de los expertos propuestos por la CIDH, se podrían revisar todos los expedientes que incluso en las declaraciones tiene incoherencias que deben ser revisadas, "exigimos al gobierno federal que agilice la entrada de los expertos".
Don Mario González dijo que hasta este momento no se tiene definida cuál será la estrategia de lucha para los próximos días, porque la noticia ha generado consternación entre los padres, "vean las caras de los padres, están destrozados, ahorita es un momento de duelo y después definiremos cómo seguir, pero es un hecho que no podemos dejar de buscar a nuestros muchachos porque aún nos faltan 42".
Indicó que en los próximos días habrán de reunirse con la base estudiantil de la normal y algunas organizaciones que han participado activamente en este movimiento, para definir cuál será el plan de acción, pero confirmó que la lucha seguirá hasta que aparezca el último de los muchachos y se mantendrá con la exigencia de "vivos se los llevaron, vivos los queremos", porque mientras no haya una prueba científica contraria, para ellos los jóvenes siguen vivos en espera de ser rescatados.
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