Alvaro Velázquez
TLALNEPANTLA, Méx.Un maestro de la "brocha gorda", que pintaba la fachada de una casa para ganarse un dinero y comprar la cena de Año Nuevo para su familia, perdió la vida trágicamente después de que al estar pintando sobre una marquesina, accidentalmente resbaló, perdió el equilibrio y cayó al vacio desde el segundo nivel del inmueble.
Al escuchar el tremendo golpazo y darse cuenta que el pintor se había caído, la dueña de la casa -presa de la angustia y la desesperación- de inmediato pidió el auxilio de una ambulancia de la Cruz Roja; sin embargo, cuando los paramédicos llegaron ya era demasiado tarde, pues debido a que el trabajador de la brocha cayó de cabeza, su muerte fue prácticamente instantánea.
Los hechos, que costaron la vida de este hombre, conocido únicamente como "Don Jesús", de 55 años de edad, se registraron minutos después del medio día del miércoles, en el domicilio ubicado en el número 146 de la calle Alamo, en la Colonia Los Reyes Iztacala, segunda sección, en este municipio.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo a las versiones que dio la señora Argelia Gómez Avila, de 41 años de edad, dueña de la vivienda, ante la insistencia del ahora occiso, que en repetidas ocasiones le pidió que lo contratara para pintar la fachada de su inmueble y ganarse un dinero para comprar la cena de Año Nuevo de su familia, finalmente le dio el trabajo.
Desde temprana hora del miércoles, dijo la mujer, el señor Jesús, como lo acordaron, comenzó a pintar la casa; luego de algunas horas, cuando ella se encontraba dentro de su domicilio, escuchó un golpazo y gritos en la calle, y al salir para saber qué había pasado, aterrorizada descubrió que al estar pintando, parado en la marquesina del inmueble, accidentalmente resbaló, perdió el equilibrio y cayó pesadamente de espaldas sobre la banqueta.
A consecuencia del brutal golpazo que recibió en la cabeza, dijo la desconcertada y triste mujer, el señor Jesús quedó inconsciente y sin movimiento, posteriormente cuando paramédicos de la Cruz Roja llegaron para brindarle los primeros auxilios determinaron que ya no podían hacer nada por él, pues ya había muerto.
Al tener conocimiento del lamentable hecho, el agente del ministerio público se presentó en el lugar donde, una vez que realizó las diligencias ministeriales y ordenó el levantamiento del cadáver, dio inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio
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