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Se fortalece la confianza para instrumentar las reformas ya aprobadas, dice V. Andrade
Alejandro Colón
Con la entrada en vigor ayer del Sistema Nacional Anticorrupción, México da un paso trascendente para reivindicar su ética pública y fortalecer la rendición de cuentas, pues toma los nuevos puntos de materia de combate a la corrupción, como es la regulación de conflicto de interés, afirmó el Secretario de la Función Pública, Virgilio Andrade Martínez.
En el evento donde el Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, promulgó la reforma constitucional respectiva, el funcionario destacó que el nuevo instrumento jurídico es una reforma de Estado porque abarca todos los niveles de gobierno e incide directamente en la conducta de los servidores públicos, desde el momento en que los expedientes estarán abiertos siete años posteriores a dejar el cargo.
Asimismo, dijo que permite un adecuado equilibrio de poderes, porque deposita en la Auditoría Superior de la Federación la facultad de fiscalizar en forma permanente el destino de los recursos públicos de los poderes, pero también en varios aspectos de las entidades federativas.
Con esta reforma, consideró muy importante que "coadyuvemos a fortalecer la confianza para instrumentar adecuadamente las reformas ya aprobadas; a coadyuvar para fortalecer el clima de legalidad en el desarrollo de negocios, en las inversiones y en el comercio. Y por supuesto, a consolidar condiciones de transparencia en el desarrollo de infraestructura, en la aplicación de los programas sociales para abatir la desigualdad y en la provisión de mejores servicios públicos y de calidad".
En tanto, el auditor superior de la Federación, Juan Manuel Portal Martínez, señaló que la reforma constitucional promulgada ayer por el Primer Mandatario es una nueva ruta que no se circunscribe al acto meramente normativo, sino que es una nueva forma de actuar que debe de involucrar el trabajo decidido de todos
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