Por: Raúl Macías, LA PRENSA
Cuando los problemas no son arreglados con palabras y cerrazón, es entonces cuando se le da paso a la violencia y ésta ocasiona la tragedia y así fue lo ocurrido en la Colonia Gabriel Hernández, donde varios sujetos "limaron" asperezas a punta de bala, lo que dejó como resultado una persona muerta y otra gravemente lesionada, mientras que los responsables se dieron a la fuga.
Durante las investigaciones realizadas por elementos de la policía capitalina, se conoció que el ahora occiso respondía al nombre de Oswaldo Tlahuizo Valles, de 35 años de edad, y de acuerdo a su progenitora, de nombre Luz María, su vástago estuvo detenido en el 2000 en el interior del Reclusorio Preventivo Norte en donde se le siguió un proceso por delitos contra la salud.
Por estas afirmaciones de la señora, las autoridades policiacas presumen que el crimen pudo haber sido un ajuste de cuentas entre personas dedicadas al narcomenudeo, por lo que será una de las principales líneas de investigación, esperando con ello poder dar con el paradero del o los criminales que emprendieron la huida luego de haber asesinado a Oswaldo y herido de gravedad a Vladimir Erate Mercado.
Los hechos se registraron en la calle de Cabo Finisterri, Colonia Gabriel Hernández, perímetro de la Delegación Gustavo A. Madero. De acuerdo a las primeras indagatorias, Oswaldo y Vladimir se agarraron a balazos con otros sujetos, pero a éstos dos les tocó la peor parte, y es que pese a que el lesionado tenía en su poder una pistola .357 Magnum, al parecer no hizo blanco en los rivales.
Sin embargo, y pese a que familiares y amigos de la víctima desconocen el motivo de la tragedia, exigieron a las autoridades de la Procuraduría capitalina que se le haga justicia, por lo que los "judilocos" ya se encuentran en busca de los responsables, para de este modo poder determinar, cuáles fueron las causas por las que se dio el enfrentamiento a balazos.
Fue el agente del ministerio público de la Coordinación Territorial Gustavo A. Madero Cuatro, quien tomó conocimiento de lo sucedido por lo que dio inicio a la averiguación previa correspondiente por el delito de homicidio y lesiones por disparo de arma de fuego en contra de quien o quienes resulten responsables, aunque se espera conocer la versión del lesionado.
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