El presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, dejó en claro "que un presidente no tiene amigos, el único interés es el avance de la República y ese será el actuar de mi gobierno".
Al asistir a la comida de los 300 Líderes de México, Peña Nieto aseveró que no aspira a ser un gran orador que encante con sus discursos, sino que aspira, dijo, a dar resultados.
En su discurso manifestó que un líder es la persona que tiene la capacidad para convocar y transformar la realidad, por lo que adelantó que asumirá la total responsabilidad de las decisiones que tomen en su administración.
En el patio central del Museo Nacional de Antropología e Historia, el político mexiquense enumeró los cinco atributos del liderazgo que asumirá a partir del 1 de diciembre, los cuales son: claridad en el rumbo, disposición para formar equipos de excelencia más allá de signos partidarios, toma de decisiones, capacidad para generar acuerdos en donde no hay imposición y dar resultados.
En cada uno de los atributos expresó su disposición de concretar acuerdos y con ello motivar la participación social.
"Tengo claro que en el México democrático de hoy no se puede imponer de manera unilateral una visión única; mi actitud será la de recoger distintas visiones y posiciones, y construir a partir de ellas", aseveró.
Subrayó que es claro que en el ejercicio de una Presidencia democrática se obliga a que quien la ejerce busque en todo momento el diálogo constructivo, el respeto a los otros y la disposición para celebrar los acuerdos y consensos que deban tener lugar.
El ex gobernador del Estado de México se dijo convencido de que la transparencia es la que definirá los indicadores básicos de los logros y resultados, por lo que insistió en que tiene claro el reto que tiene por delante y el cual asume como una gran oportunidad.
"Pasé por un proceso democrático ejemplar. El proceso que difícilmente creo que tenga parangón en la historia de México por haber sido el más vigilado con más de 3 millones de mexicanos que participaron".
En ese sentido, dijo que es claro que en el resultado obtenido existe la confianza en el proyecto postulado.
Recordó las acciones de su campaña, de proponer y decidir de manera informada, escuchando las distintas posiciones. En ocasiones de las distintas expresiones políticas, de los distintos sectores sociales.
Al asistir a la comida de los 300 Líderes de México, Peña Nieto aseveró que no aspira a ser un gran orador que encante con sus discursos, sino que aspira, dijo, a dar resultados.
En su discurso manifestó que un líder es la persona que tiene la capacidad para convocar y transformar la realidad, por lo que adelantó que asumirá la total responsabilidad de las decisiones que tomen en su administración.
En el patio central del Museo Nacional de Antropología e Historia, el político mexiquense enumeró los cinco atributos del liderazgo que asumirá a partir del 1 de diciembre, los cuales son: claridad en el rumbo, disposición para formar equipos de excelencia más allá de signos partidarios, toma de decisiones, capacidad para generar acuerdos en donde no hay imposición y dar resultados.
En cada uno de los atributos expresó su disposición de concretar acuerdos y con ello motivar la participación social.
"Tengo claro que en el México democrático de hoy no se puede imponer de manera unilateral una visión única; mi actitud será la de recoger distintas visiones y posiciones, y construir a partir de ellas", aseveró.
Subrayó que es claro que en el ejercicio de una Presidencia democrática se obliga a que quien la ejerce busque en todo momento el diálogo constructivo, el respeto a los otros y la disposición para celebrar los acuerdos y consensos que deban tener lugar.
El ex gobernador del Estado de México se dijo convencido de que la transparencia es la que definirá los indicadores básicos de los logros y resultados, por lo que insistió en que tiene claro el reto que tiene por delante y el cual asume como una gran oportunidad.
"Pasé por un proceso democrático ejemplar. El proceso que difícilmente creo que tenga parangón en la historia de México por haber sido el más vigilado con más de 3 millones de mexicanos que participaron".
En ese sentido, dijo que es claro que en el resultado obtenido existe la confianza en el proyecto postulado.
Recordó las acciones de su campaña, de proponer y decidir de manera informada, escuchando las distintas posiciones. En ocasiones de las distintas expresiones políticas, de los distintos sectores sociales.
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