Por: Armando Maceda
Purificación Carpinteyro Calderón, diputada del PRD, señaló que la creación de la coordinación para perseguir la trata de personas no es más que una "medida administrativay decorativa" de la Procuraduría General de la República no resolverá el problema de fondo; el PRI y el PAN la avalan.
"Tomar ese tipo de medidas administrativas es estar dando patadas de ahogado cuando ya está terminando una administración. Es una medida meramente decorativa; la creación de nuevos cargos políticos no resuelve ningún problema", opinó en entrevista.
Mejor consideró que la PGR debe impulsar y mantener un diálogo serio con especialistas en la materia y los encargados de la impartición de justicia, para determinar las acciones necesarias para erradicar la trata de personas.
Pero para los diputados del PRI y PAN es bueno que la Procuraduría General de la República haya creado esta semana una coordinación general para combatir la trata de personas.
La priista Ana Isabel Allende Cano dijo que simplificará la forma en que las víctimas del delito acceden a la justicia y señaló la necesidad de que se aprueben otras normas, como la Ley de Víctimas que envió recientemente el Ejecutivo al Senado de la República.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) este delito genera ganancias anuales de unos 32 mil millones de dólares a nivel mundial y según la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, en México operan al menos 47 bandas dedicadas al tráfico y la explotación de las personas.
"Hasta hace pocos días era muy caro para una persona que sufría algún delito poder acceder a justicia; con estos esquemas se podrá modificar ese sistema para poder atender también a la víctima", indicó Allende Cano.
El diputado del PAN Rafael Acosta Croda consideró que la nueva coordinación trabaje para demostrar que no es "mera simulación" y se pronunció porque la PGR integre a su equipo personas de probada civilidad y solvencia moral.
Señaló que no deberá vulnerarse el derecho de aquéllas personas que decidan dedicarse al sexoservicio, siempre y cuando sean mayores de edad y lo hagan de manera voluntaria.
"Lo que no debe de ser es que abusen de ellas dándoles sueldos de hambre o esclavizándolas, y lo que menos debe de ser es prostituir a menores de edad; eso debe de ser castigado duramente", enfatizó.
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