Por: Armando Maceda
Diputados del PRI y PRD llaman la atención al gobierno federal por el uso de tortura por parte de policías y elementos de las fuerzas armadas, una vieja práctica para hacer declarar a los detenidos, como alertó Amnistía Internacional y a la que el gobierno ignora sus señalamientos.
Amnistía Internacional presentó el pasado jueves el informe "Culpables conocidos, víctimas ignoradas: Tortura y maltrato en México", en el que asegura que éstos son prácticas sistemáticas y generalizadas que se han incrementado durante la administración del presidente Felipe Calderón.
El vicecoordinador del grupo parlamentario del PRD, Miguel Alonso Raya, dijo que, sin duda, la tortura se ha incrementado y el informe de Amnistía debe tomarse con seriedad, ya que es un organismo que no tiene necesidad de mentir.
"En esta estrategia contra el crimen organizado, indiscutiblemente se ha intensificado la tortura y las viejas prácticas de arrancar declaraciones; hemos insistido en el caso de Ejército, que llega a las comunidades y no pregunta quién vive y quién está, llega y entra, no pide permiso y ¿quién se puede resistir a eso?", dijo.
Enfatizó que se requieren nuevos acuerdos con todas las fuerzas políticas del país y con el nuevo gobierno, que permita enfrentar de mejor manera al crimen organizado, y así terminar con los casos de violaciones a derechos humanos.
La diputada del PRI Ana Isabel Allende Cano afirmó que la tortura sigue presente en el país y, sin embargo, el gobierno lo toma como normal.
"Hay que reconocer que existe el problema y hay que entrarle de fondo a una cuestión de capacitación y de valoración de quienes están involucrados en todo el sistema, de quienes son nuestros policías, nuestras autoridades, para que se puedan sobrellevar las cosas de mejor manera", aseguró.
También dijo que hace falta legislar para cubrir vacíos legales y que las autoridades impartidoras de justicia cumplan con las normas de manera efectiva o, si no lo hacen, sean sancionados.
Ricardo Anaya Cortés del PAN aseguró que erradicar la tortura no es sólo responsabilidad del Ejecutivo federal y llamó a todas las fuerzas políticas a confrontar dichos actos y promover sanciones más severas para quien la aplique.
"Nosotros respaldamos lo que hasta ahora el gobierno del presidente Felipe Calderón ha hecho, pero debemos de seguir trabajando con la fuerzas políticas mediante un combate frontal, porque este tema no debe tener distingo partidista", dijo.
Anaya Cortés señaló que desde el Congreso de la Unión se debe fortalecer el marco jurídico para prohibir y establecer sanciones más severas a quienes hagan uso de la tortura en nuestro país.
La tortura y los malos tratos constituyen una práctica "sistemática y generalizada" que se ha incrementado "considerablemente" en los últimos seis años de Gobierno de Felipe Calderón en el marco del combate al crimen organizado, acusa Amnistía Internacional en su informe.
Los datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, recogidos en el informe, muestran un incremento de más del 300 % entre las 392 denuncias recabadas en 2007 y las 1.669 de 2011, unas cifras que según el director de Amnistía México, Alberto Herrera, esconden una situación aún más grave.
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