Patricia Carrasco
La Arquidiócesis de México consideró que ante los escenarios de "problemas sociales, agravados por la violencia y la criminalidad en gran escala" que vive México y el continente Americano, requieren revitalizar la fe en toda la región e iniciar una nueva evangelización para generar mayor acercamiento con la sociedad.
Destacó que en medio de un mundo que se desenvuelve en un frenético desarrollo material, con una inmensa riqueza natural injustamente compartida, se necesita una Iglesia plenamente identificada con Cristo para ser portadores de su Evangelio.
Esto es lo fundamental de la "Nueva Evangelización".
En el editorial titulado "Estrella de la Nueva Evangelización", publicado en el semanario católico "Desde la fe", la jerarquía de la Iglesia Católica reconoce que los cambios del mundo moderno han afectado a la religiosidad, no sólo en México, sino en el mundo entero.
Asimismo, convocó a los sacerdotes y creyentes a mantener la unidad de la Iglesia Católica.
Parte de la evangelización comenzará con el llamado Congreso Guadalupano que se realizará este mes en la ciudad de México con cientos de representantes católicos del continente Americano y el Caribe.
Con este motivo, del 16 al 19 de noviembre se tendrá un gran encuentro en la Basílica de Guadalupe con personajes venidos de todas partes del continente Americano, el norte, el centro, el sur y el Caribe.
"Muchos laicos, junto a cardenales y obispos, sin faltar la presencia de sacerdotes y religiosos, convocados por la Comisión Pontificia para América Latina, que incluye también a Canadá y Estados Unidos".
Recordó que el Papa Juan Pablo II gustaba de llamar a la Virgen de Guadalupe: "Estrella de la Nueva Evangelización", tomando en cuenta que la Virgen María, desde el Tepeyac, ha sido de gran importancia en el camino hacia Jesucristo a lo largo de nuestra historia de fe.
El pueblo mexicano se ha identificado plenamente con el mensaje de María de Guadalupe y se ha convertido en uno de los rasgos más propios de su cultura y de su experiencia de Dios, indicó.
En este marco, el gran desafío para la Nueva Evangelización es, en primer lugar, una presencia de la Iglesia en medio de la sociedad, laicos y ministros, como signo de una verdadera fe en Cristo que se convierte en compromiso con los demás.
Esta es la insistencia del Papa Francisco como la primera y más importante tarea de la Iglesia de hoy: salir a los demás para mostrar nuestra fe en el compromiso, a fin de construir una sociedad más justa y más humana.
"Salir a las periferias existenciales", dice el Papa y lo predica con el ejemplo, es decir, preocuparnos hoy por las familias que viven infinidad de problemas para curar heridas, acercarnos a los nuevos rostros de la pobreza y el sufrimiento, los inmigrantes, los desplazados, los jóvenes sin oportunidades, los que han quedado atrapados por las adicciones o el materialismo.
A través del semanario "Desde la fe" se solicitó a los ciudadanos sigan enviando ayuda solidaria a los habitantes de La Montaña de Guerrero, pues muchas comunidades indígenas continúan viviendo prácticamente a la intemperie, en campamentos improvisados con plásticos, cartón y lonas.
La arquidiócesis informó que envió un camión con despensas, el cual sólo llegó a Tlapa, debido al mal estado de las carreteras.
Los donativos pueden entregarse antes del 6 de noviembre en las oficinas del Centro de Estudios Ecuménicos, en la calle Yosemite número 45, Colonia Nápoles.
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La Arquidiócesis de México consideró que ante los escenarios de "problemas sociales, agravados por la violencia y la criminalidad en gran escala" que vive México y el continente Americano, requieren revitalizar la fe en toda la región e iniciar una nueva evangelización para generar mayor acercamiento con la sociedad.
Destacó que en medio de un mundo que se desenvuelve en un frenético desarrollo material, con una inmensa riqueza natural injustamente compartida, se necesita una Iglesia plenamente identificada con Cristo para ser portadores de su Evangelio.
Esto es lo fundamental de la "Nueva Evangelización".
En el editorial titulado "Estrella de la Nueva Evangelización", publicado en el semanario católico "Desde la fe", la jerarquía de la Iglesia Católica reconoce que los cambios del mundo moderno han afectado a la religiosidad, no sólo en México, sino en el mundo entero.
Asimismo, convocó a los sacerdotes y creyentes a mantener la unidad de la Iglesia Católica.
Parte de la evangelización comenzará con el llamado Congreso Guadalupano que se realizará este mes en la ciudad de México con cientos de representantes católicos del continente Americano y el Caribe.
Con este motivo, del 16 al 19 de noviembre se tendrá un gran encuentro en la Basílica de Guadalupe con personajes venidos de todas partes del continente Americano, el norte, el centro, el sur y el Caribe.
"Muchos laicos, junto a cardenales y obispos, sin faltar la presencia de sacerdotes y religiosos, convocados por la Comisión Pontificia para América Latina, que incluye también a Canadá y Estados Unidos".
Recordó que el Papa Juan Pablo II gustaba de llamar a la Virgen de Guadalupe: "Estrella de la Nueva Evangelización", tomando en cuenta que la Virgen María, desde el Tepeyac, ha sido de gran importancia en el camino hacia Jesucristo a lo largo de nuestra historia de fe.
El pueblo mexicano se ha identificado plenamente con el mensaje de María de Guadalupe y se ha convertido en uno de los rasgos más propios de su cultura y de su experiencia de Dios, indicó.
En este marco, el gran desafío para la Nueva Evangelización es, en primer lugar, una presencia de la Iglesia en medio de la sociedad, laicos y ministros, como signo de una verdadera fe en Cristo que se convierte en compromiso con los demás.
Esta es la insistencia del Papa Francisco como la primera y más importante tarea de la Iglesia de hoy: salir a los demás para mostrar nuestra fe en el compromiso, a fin de construir una sociedad más justa y más humana.
"Salir a las periferias existenciales", dice el Papa y lo predica con el ejemplo, es decir, preocuparnos hoy por las familias que viven infinidad de problemas para curar heridas, acercarnos a los nuevos rostros de la pobreza y el sufrimiento, los inmigrantes, los desplazados, los jóvenes sin oportunidades, los que han quedado atrapados por las adicciones o el materialismo.
A través del semanario "Desde la fe" se solicitó a los ciudadanos sigan enviando ayuda solidaria a los habitantes de La Montaña de Guerrero, pues muchas comunidades indígenas continúan viviendo prácticamente a la intemperie, en campamentos improvisados con plásticos, cartón y lonas.
La arquidiócesis informó que envió un camión con despensas, el cual sólo llegó a Tlapa, debido al mal estado de las carreteras.
Los donativos pueden entregarse antes del 6 de noviembre en las oficinas del Centro de Estudios Ecuménicos, en la calle Yosemite número 45, Colonia Nápoles.
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