CIUDAD DEL VATICANO, (Notimex).- El Papa Francisco sorprendió hoy durante su audiencia general de los miércoles al juguetear con "Amor", un perico verde con la frente amarilla de dos años que le presentó uno de los fieles en la Plaza de San Pedro.
"El Papa Francisco notó inmediatamente entre la multitud a 'Amor', mi perico. Me sonrió divertido y me hizo el gesto de acercarme. Con gran emoción lo hice pasar de mi mano a la suya. El Papa lo tuvo por algunos instantes y lo bendijo", dijo el propietario, Francesco Lombardi.
El encuentro entre el Pontífice y el animal es aún más singular si se piensa que Francesco Lombardi, de 47 años y originario de Trezzano sul Naviglio (Milán), es uno de los más famosos strippers italianos y participó en diversas películas eróticas.
"Ghibly", como se le conoce en el mundo artístico, se ubicó en la plaza junto a un numeroso grupo de artistas circenses y callejeros que asistieron a la audiencia papal.
"Fui a Roma con mi mujer Valentina y con mis hijas Ludovica y Lucrecia de 12 y un año, para encontrar al Papa Francisco. Llevé también al papagayo, lo amaestramos y nos sigue a todos lados. Agradeceré por siempre el gesto de afecto que tuvo con nosotros y los animales", reveló.
No obstante su profesión, "Ghilby" se ha caracterizado por tener un destacado empeño social, ha sido socorrista en ambulancias de la Cruz Verde en su ciudad natal y hasta emprendió la carrera política, aunque sin mucho éxito.
"El Papa Francisco notó inmediatamente entre la multitud a 'Amor', mi perico. Me sonrió divertido y me hizo el gesto de acercarme. Con gran emoción lo hice pasar de mi mano a la suya. El Papa lo tuvo por algunos instantes y lo bendijo", dijo el propietario, Francesco Lombardi.
El encuentro entre el Pontífice y el animal es aún más singular si se piensa que Francesco Lombardi, de 47 años y originario de Trezzano sul Naviglio (Milán), es uno de los más famosos strippers italianos y participó en diversas películas eróticas.
"Ghibly", como se le conoce en el mundo artístico, se ubicó en la plaza junto a un numeroso grupo de artistas circenses y callejeros que asistieron a la audiencia papal.
"Fui a Roma con mi mujer Valentina y con mis hijas Ludovica y Lucrecia de 12 y un año, para encontrar al Papa Francisco. Llevé también al papagayo, lo amaestramos y nos sigue a todos lados. Agradeceré por siempre el gesto de afecto que tuvo con nosotros y los animales", reveló.
No obstante su profesión, "Ghilby" se ha caracterizado por tener un destacado empeño social, ha sido socorrista en ambulancias de la Cruz Verde en su ciudad natal y hasta emprendió la carrera política, aunque sin mucho éxito.
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