Siempre junto al pueblo, pide Papa a obispos mexicanos

Pa­tri­cia Ca­rras­co


El Pa­pa Fran­cis­co la­men­tó la vio­len­cia que afli­ge a la so­cie­dad me­xi­ca­na, a los jó­ve­nes prin­ci­pal­men­te, y di­jo co­no­cer la preo­cu­pa­ción de los obis­pos me­xi­ca­nos por las víc­ti­mas del nar­co­trá­fi­co y por los gru­pos so­cia­les más vul­ne­ra­bles, así co­mo su com­pro­mi­so por la de­fen­sa de los de­re­chos hu­ma­nos; por lo que los con­mi­nó a pro­mo­ver es­pí­ri­tu de con­cor­dia a tra­vés de la cul­tu­ra del en­cuen­tro, del diá­lo­go y de la paz.

Al re­ci­bir a un gru­po de 80 obis­pos de la Con­fe­ren­cia del Epis­co­pa­do Me­xi­ca­no, que rea­li­zan la vi­si­ta "ad li­mi­na apos­to­lo­rum", en­ca­be­za­dos por el pre­si­den­te de la CEM, el car­de­nal de Gua­da­la­ja­ra, Jo­sé Fran­cis­co Ro­bles Or­te­ga, el Su­mo Pon­tí­fi­ce les pi­dió per­ma­ne­cer siem­pre jun­to al pue­blo y ase­gu­ró que si­gue de cer­ca las pro­ble­má­ti­cas que afron­ta co­ti­dia­na­men­te el país la­ti­noa­me­ri­ca­no.

Tam­bién ex­hor­tó a los obis­pos y sa­cer­do­tes a des­po­jarse de "lo oro­pe­les de la mun­da­ni­dad, del di­ne­ro y del po­der".

"Pi­dan a sus fie­les que re­cen por mí, pues lo ne­ce­si­to. Y tam­bién les pi­do que le lle­ven un sa­lu­do mío, sa­lu­do de hi­jo, a la Vir­gen de Gua­da­lu­pe'', di­jo el Pon­tí­fi­ce.

Tam­bién les pi­dió "ne­go­ciar con Dios por el pue­blo", lo cual se ha­ce re­zan­do y siem­pre al la­do de la gen­te. "Con es­tas dos co­sas si­gan ade­lan­te"

En su men­sa­je ase­gu­ró ha­ber "apren­di­do mu­cho" de su en­cuen­tro con los pas­to­res me­xi­ca­nos, re­co­no­ció que en di­ver­sos sec­to­res del país se vi­ven "pro­ble­mas se­rios", pe­ro re­co­no­ció que la Igle­sia allí "es­tá con­so­li­da­da so­bre fun­da­men­tos muy fuer­tes".

La Con­fe­ren­cia del Epis­co­pa­do Me­xi­ca­no in­for­mó lo an­te­rior y de­ta­lló que el Pa­pa Fran­cis­co agra­de­ció las pa­la­bras del pre­si­den­te de la CEM, y pla­ti­có so­bre la ce­le­bra­ción del Bi­cen­te­na­rio de la In­de­pen­den­cia de Mé­xi­co y el Cen­te­na­rio de la Re­vo­lu­ción Me­xi­ca­na, "han cons­ti­tui­do una oca­sión pro­pi­cia pa­ra unir es­fuer­zos en fa­vor de la paz so­cial y de una con­vi­ven­cia jus­ta, li­bre y de­mo­crá­ti­ca".

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