Alvaro Velázquez
TEXCOCO, Méx.- Después de la presión que ejercieron a las autoridades policiacas para localizarlos, finalmente, tras nueve días de desaparecidos, esta mañana seis integrantes de una familia que habían salido a bordo de una camioneta del poblado de San Felipe, en este municipio, para dirigirse al Estado de Oaxaca y cumplir una manda a la Virgen de Juquila, aparecieron muertos, luego de que la camioneta en que viajaban se volcó y cayó a una barranca de aproximadamente 250 metros de profundidad.
Con esta información y ante la presunción de que los desaparecidos se podían encontrar en esa zona, elementos de la PGJEM, en coordinación con sus homólogos de Oaxaca, buscaron minuciosamente por toda la zona, hasta que finalmente encontraron la camioneta de los integrantes de esta familia en el fondo de una barranca de aproximadamente 250 metros de profundidad.
Debido a que la zona era de difícil acceso, los ministeriales solicitaron la intervención inmediata de los diferentes cuerpos de emergencia para que con equipo especial pudieran bajar y prestar auxilio pero desafortunadamente todas las personas que viajaban en la unidad ya estaban muertas.
Por tal motivo, se pidió la intervención del ministerio público para que diera fe de los hechos y ordenara el levantamiento de los cadáveres.
Posteriormente, cuando los cuerpos estuvieron dentro de las instalaciones del Semefo del centro de justicia local, familiares de los ahora occisos sin temor a equivocarse los identificaron como quienes en vida respondieron a los nombres de Adrián Susano Ramírez, de 30 años de edad; su esposa, Mónica Hernández Barrera, de 33 y sus hijos, Alan Adrián, Mónica Evelín y Alejandro Raymundo, de 11, 6 y 3 años de edad, respectivamente, además de su compadre Israel Morales de la Rosa, de 35, quien se ofreció a acompañar a la familia para ayudarles a manejar.
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