Raúl Macías
Autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), lograron la detención de un hombre y su hermana, porque fue el primero quien el pasado lunes le quitó la vida a su cuñado Omar Noé Reyes Chávez en calles de la Colonia San Bartolo El Chico, Delegación Tlalpan, y es que luego de cometer el crimen huyeron del lugar para que se creyera que se había tratado de una pelea callejera.
Como oportunamente lo publicó LA PRENSA en la edición del pasado martes, en Periférico Sur fue localizado el cuerpo de un hombre que presuntamente había perdido la pelea durante una riña; sin embargo, al llevar a cabo las investigaciones los elementos de la Policía de Investigación, ubicaron a Lorena Hernández Rosas, concubina del ahora occiso.
Al iniciar los interrogatorios la mujer aseguraba desconocer quién o quiénes le quitaron la vida a Omar, pero ante la insistencia de la autoridad, la mujer terminó por confesar, que el pasado lunes le pidió a su expareja que la llevara a la fiesta en el poblado de Tepepan.
Añadió que se fueron sin problemas, pero al llegar al lugar el hombre comenzó a ingerir bebidas embriagantes y a fumar mariguana.
Que momentos después le pidió que se fueran ya para su hogar, pero que eso violentó a Omar, por lo que la comenzó a insultar y posteriormente a golpear, hasta que la despojó de la bolsa de mano que traía consigo, sin que la dejara de agredir físicamente, por lo que en un momento de descuido, logró zafarse de él y se dirigió a la empresa en donde trabaja su hermano Ismael Hernández Rosas.
Cuando su consanguíneo la vio que lloraba y llevaba marcados varios golpes, le cuestionó qué le había pasado y ella le comenzó a relatar lo sucedido en la feria.
Esto encolerizó a Ismael quien de inmediato se dirigió junto con su "carnala" a donde se encontraba el agresor, explicó que ahí su hermano encaró al agresor y que tras discutir se liaron a golpes.
Pero como Ismael llevaba el arma de fuego de la empresa donde laboraba, comenzaron a "forcejear" ambos y de pronto se escuchó un disparo, por lo que a los pocos segundos vieron cómo se desplomaba Omar y aprovecharon la confusión y miedo entre los asistentes, para alejarse del lugar, pero todo este acto fue grabado por las cámaras de seguridad de una negociación cercana.
Fue así como se logró conocer a los probables responsables de este crimen que fue aclarado por elementos de la Policía de Investigación, mientras que el agente del ministerio público ordenó que al hombre lo remitieran ante un juez del Reclusorio Sur y a la fémina al penal de Santa Martha Acatitla
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