Debido a que cada vez más adultos mayores demandan de cuidados, el Gobierno de la Ciudad de México trabaja, en conjunto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), de Naciones Unidas, para estar a la vanguardia en este tema, con un programa especial.
Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Desarrollo Social, comentó que el gobierno del doctor Miguel Ángel Mancera busca capacitar y apoyar económicamente a quienes se encargan del cuidado de algún adulto mayor.
Mencionó que es una prioridad de la #CapitalSocial generar políticas sobre este tema, que se basen en principios fundamentales como el reconocer y garantizar los derechos de las cuidadoras y de quienes reciben el cuidado, a fin de lograr la autonomía e independencia de las personas mayores.
Resaltó que para lograr esta estrategia social, se buscó la colaboración de la CEPAL, con el objetivo de realizar el estudio "Necesidades de cuidado de las personas mayores en la Ciudad de México: diagnóstico y lineamientos de política", como punto de partida para determinar la situación en la que se encuentra la CDMX en esta área.
Expresó que a través de las intervenciones gerontogeriátricas en el domicilio de adultos mayores, se obtuvo que el 83% de quienes se encargan del cuidado de otros, son mujeres, por lo que es necesario establecer una red de apoyo familiar, con información y asesoría para que sean capacitadas en la atención hacia sus adultos mayores.
En ese sentido, el Instituto para la Atención de los Adultos Mayores cuenta ya con 800 Profesionales en Servicios a Adultos Mayores capacitadas con cursos y diplomados especializados en gerontogeriatría, para la atención y supervisión de las personas mayores en situación de vulnerabilidad.
Recordó que en agosto de este año se iniciará el programa con las primeras 300 mujeres, quienes llevarán a cabo acciones de cuidado a adultos mayores, por lo que recibirán un pago durante tres meses y simultáneamente participarán en un curso teórico-práctico para sistematizar sus habilidades y capacidades adquiridas.
Dijo que al concluir con la capacitación, las cuidadoras recibirán una constancia de participación con valor curricular, la cual les permitirá en un futuro dedicarse al cuidado de personas mayores como una actividad profesional-laboral.
Subrayó que con esto se desarrollará un apoyo profesional, remunerado y basado en formas solidarias de atención, con el fin de reconocer el cuidado como un bien público, al ayudar económicamente a las personas dedicadas a este trabajo y al favorecer su bienestar físico y mental.
Publicar un comentario