* El presidente del TSJDF rindió hoy su Informe de Labores 2015, en un acto al que asistió el jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa.
* En su discurso, puntualizó que el disenso siempre es bienvenido cuando está pensado para construir, contribuir y engrandecer los proyectos.
* Hizo un balance general de ocho años de su gestión, y aseguró que hoy se tiene un TSJDF diferente, pero no por maquillajes que se escurren o cirugías estéticas practicadas para hacer parecer nuevo lo viejo.
El presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), magistrado Edgar Elías Azar, afirmó que a lo largo de su gestión no ha habido tropiezos, pero sí obstáculos, y añadió que en ocasiones ha parecido que falta el aliento, dado que desde los rincones hay quienes conspiran en contra de los proyectos judiciales más caros.
Al rendir su Informe de Labores 2015, enfatizó que el disenso siempre es bienvenido cuando está pensado para construir, contribuir y engrandecer los proyectos, y reconoció que, pese a los avances logrados en ocho años de gestión, aún hay rezagos, pero no por ignorancia del rumbo ni por carencia de objetivos.
Elías Azar expuso que han sido tiempos difíciles para todos, en lo que se tuvo que impulsar un proyecto ambicioso para dar un nuevo rostro a la justicia, luego de que la función judicial vivía autoinhibida, en su nicho o reservorio de togas, expedientes y trámites.
Con la presencia del jefe de gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera Espinosa; del consejero jurídico de la Presidencia de la República, Humberto Castillejos Cervantes, y del presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa, Leonel Luna Estrada, el magistrado afirmó que han sido ocho años en los que se ha logrado tener un TSJDF diferente, pero no por maquillajes que se escurren o cirugías estéticas practicadas para hacer parecer nuevo lo viejo.
Se refirió a la oralidad, y expresó el compromiso de los tribunales de todo el país para que entre en vigor en tiempo la reforma constitucional en materia penal. Sin embargo, aclaró que la justicia oral no se agota en esa rama, ya que planteó que la modernización jurídica pasa por la implementación de la oralidad en el ámbito civil, familiar y mercantil.
Pidió al consejero jurídico de la Presidencia, Humberto Castillejos Cervantes, llevar el mensaje al presidente Enrique Peña Nieto de que la jurisdicción local de todo el país no fallará en los objetivos puntuales en materia de justicia, fundamentalmente aquella a la que se ha llamado justicia cotidiana; la que no lleva adornos ni florituras, y que se imparte todos los días en bien de los mexicanos, precisó.
El magistrado refirió que durante 2015 se ejercieron 5 mil 827 millones de pesos, es decir, mil millones de pesos más de lo presupuestado por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, y, en este sentido, reconoció el apoyo del jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera Espinosa, para aumentar el gasto, con miras a enfrentar el reto de implementar la oralidad en todas las materias.
Se planteó retos, y en ese sentido dijo que trabajar por la autonomía presupuestal y financiera de la función judicial, como Poder del Estado, se mantiene como una bandera digna y firme a enarbolar.
Habló, asimismo, de proyectos a consolidar, y se refirió en específico a la Escuela Nacional de Jueces. Dijo que éste representa un reto formidable, porque en él se habrán de fincar las bases de la renovación integral de la carrera judicial, a partir del establecimiento de los perfiles del funcionario judicial moderno: el de la oralidad, el que usará intensivamente los medios alternativos de solución de controversias, y el que sabrá moverse en los territorios de la gestión judicial especializada.
Al comentar sobre lo que implica mover a un tribunal del tamaño del TSJDF, dijo que se requieren más que buenas intenciones y grandes deseos, ya que su tamaño y magnitud corresponde al de 13 entidades federativas. Agregó que, por otra parte, a su labor se han añadido otras responsabilidades, como la de ejecución de sanciones penales, rubro en el que se han tramitado unos 12 mil asuntos.
Afirmó que, de 2008 a la fecha, se incrementó en 84 por ciento los recursos inmobiliarios del TSJDF, y que hoy se tienen firmes las bases para constituir la Ciudad Judicial. Hizo notar el cambio sufrido por el Instituto de Ciencias Forenses, que hace ocho años no tenía ni la capacidad instalada ni la tecnología con la que cuenta ahora.
Los servicios de mediación, abundó, se prestan en la actualidad en el Centro de Justicia Alternativa, órgano que hace ocho años era simplemente una oficina de negociación.
Durante su mensaje, el magistrado Elías Azar hizo alusión a la "añorada reforma política" para el Distrito Federal, recientemente aprobada en el Congreso de la Unión. Enfatizó que con ello se otorga a los capitalinos la ansiada mayoría de edad política. Expresó, asimismo, una felicitación al jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera, al considerar que se trata de un histórico éxito.
En relación al establecimiento de una Constitución para la Ciudad de México, pidió que en el apartado del Poder Judicial se establezca, finalmente, la tan anhelada autonomía e independencia financiera para el TSJDF, ya que la ciudad lo merece y el órgano judicial capitalino lo necesita.
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--Coordinación de Comunicación SocialTribunal Superior de Justicia del Distrito Federal51-30-48-6755-18-40-67
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